El principio de todo (Capítulo I)

Era el principio de todo toda la creación respondía y esta respondía a un solo ser todopoderoso el que había creado el universo y todo lo que en ello existía, con tanto amor fue creado todo la luz estaba en todas partes en cada rincón del universo, esta venía desde un lugar en lo más alto la cual era tan resplandeciente ¿pero de dónde provine? Un ser es el creador de lo más bello que se ha podido crear en toda la eternidad se presenta como el gran artista del universo el cual cuidadosamente ha creado todo con todos los detalles nada se le ha escapado.

Las estrellas están siendo creadas una a una las cuales han llegado a un punto que nadie las puede contar son como la arena del mar y todas obedecen y aman a un solo ser creador cada una responde con más y más amor porque solo eso pasa por su corazón, de pronto en su afán de creación se se escucha que lo más bello, perfecto e inteligente está por nacer “ nos han llamado, nos han llamado a contemplar la más perfecta creación de nuestro gran creador.!” habla un porta voz el cual se escucha por todo el universo.

A lo lejos se escucha la música más bella que algún oído haya escuchado algunas ves en este es el momento más importante del creador todo su amor, belleza, inteligencia y sabiduría será reflejado en este nuevo ser ¿ pero de quien se trata? Corre la intriga entre todas las estrellas atentas a lo que pasará, cada vez aquella melodía es más hermosa nadie nunca la ha escuchado la cual agrada a todo ser de todo tipo de instrumento se compone la cual sale del mismo lugar en el que se encuentra el creador del todo.

Al pasar un tiempo se resplandece todo el universo con una luz mucho más brillante de la que lo iluminaba desde que se creó la primera estrella era tan resplandeciente que nadie podía fijar su mirada en ella, el momento más importante del toda la historia la anterior y la futura estaba pasando en ese preciso momento.

El ser más bello a nacido alégrense y regocijarse toda la creación porque todo mi poder está reflejado en mi creación perfecta ante todo ojo acabado de hermosura no hay nadie más inteligente después de mi dice una voz desde lo más alto que es donde se encuentra el creador, este administrará todo mi poder será el que llevará consigo mi fortaleza yo estaré con y el estará conmigo después de mí y mi santo espíritu él será el poseedor de todo.

-Ve!, Vuela mi estrella de la mañana e ilumina con tu sabiduría y poder el universo todo lo que en ello hay te doy por heredad, mis estrellas están bajo tu autoridad porque me siento muy orgulloso de haberte creado como ningún otro mi estrella de la mañana le mencionó sus primeras palabras que le ha dedicado el creador.

-volaré e iluminaré todo el universo en tu nombre oh creador de todo lo que en ello hay, protegeré todo aquello que esté bajo tu gran poder porque como tú no existe no existirá otro, te protegeré tu santidad y con todas tus estrellas te serviré, en lo más cerca de tu trono estaré por toda la eternidad.

– Ahora ve y toma de toda roca preciosa que encuentres y hazte las vestiduras más bellas que jamás nadie haya vestido he creado el santo monte donde te pondré y ahí estará tu trono gobernando todas las naciones que he creado.

Bajó y se vistió de toda roca preciosa así como su creador se lo había dicho y un trono rodeado de piedras de fuego lo esperaba en el santo monte del creador y una vez que se sentó en este inicio a gobernar entre todas las naciones del universo porque por mandato se le había entregado, cuidando la santidad de su creador la cual su razón de existir era esa, alabanzas desde su trono salían hacia lo más alto.

-vamos subamos y adoremos de día y de noche que la santidad de nuestro creador se extienda por todo el universo.

Y todas las estrellas se quedaban admiradas por este ser tan inteligente, resplandeciente y hermoso toda una obra de arte dibujada por el pintor más talentoso que alguna vez haya existido, y subían a adorar y un silencio venia de las nubes porque todos contemplaban el máximo poder de su creador en él.

Las estrellas estaban creadas en una serie de jerarquías donde la estrella de la mañana era quien estaba en una sola comunión con el creador él era el que tenía la comunicación cara a cara coordinaba las alabanzas de todas estrellas, administraba el amor de ellas hacia su creador. Continuamente la estrella de la mañana se paseaba por el universo difundiendo el mensaje en todas las naciones esto con un grupo de estrellas que le servían directamente a él.

(…)