La razón

El nacimiento de la tecnología nos dejó a todos con los ojos abiertos. Eso que sus primeros logros no llegaron hasta nosotros pasado bastante tiempo.

Vivíamos prácticamente en la «Edad Media» después de la guerra civil. La postguerra fue larga y peor que la guerra. Había que reinventarse, volver a empezar.

Poco a poco , gracias a la radio , fuimos saliendo de un túnel muy, muy oscuro. En las ciudades se enteraban antes, pero en los pueblos llegaron los avances tarde. Yo vi la luz eléctrica a los 5 años.

Todo era manual: labores de casa, del campo, viajes…Todo muy trabajoso , agotador y sin parar, sin descansos.

Cuando empezó el furor de ordenadores , teléfonos ,electrodomésticos , operaciones con máquinas… ya no se podía parar. Fue un cambio brutal en pocos años.

Mis padres de 96 años no alcanzan a comprender como llegó todo esto y me sorprendo de como lo van aceptando. Como nos vamos adaptando. La mente humana es un prodigio.

Recuerdo los primeros cursos para manejar ordenadores: aparatos muy grandes y uno solo para una clase de unos 50 alumnos. En el lugar que estaba ,ni siquiera veía bien el aparato.

Unos cinco años más adelante,y a pesar de cursos intermedios, me encuentro ante un aparato para dos. Feliz que estaba, el compañero de turno se manejaba muy bien y todo iba de maravilla.

Pero la profe se dió cuenta y echando por tierra mi fama de buena alumna ,de notas altas y conducta intachable, me separó de él. Me castigó lejos donde no me podía nadie echar un cable.

Claro, me sentó de muerte. Cojo el ratón y la dichosa flechita que se salía del cuadro y no aparecía ni pidiendoselo a S. Antonio que solía cumplir encontrandome todas las cosas.

No sé que cara pondría. La profe me suelta: – Tiralo y pisalo que lo necesitas- Que mal.

Hice más y más cursos y no soy muy entendida pero puedo , por ejemplo participar en este concurso. Y con eso y procurando mejorar a diario me voy conformando.

Los avances en todos los campos fueron impotantísimos y tan rápidos que lo que compraste ayer , ya no sirve para mañana.

No se podría concebir la vida sin la tecnología. Está en la salud, en la enseñanza en la ingeniería ,en la alimentación… Hasta en las artes de cualquier tipo.

Si algo falla y nos quedamos sin luz, por ejemplo, el mundo se pararía. 

Recuerdo un día que faltó la luz en el pueblo y ni se  ordeñaban las vacas, en el super no podían cobrar , los ordenadores de los bancos parados… y no se entretenían los niños

Antes no teníamos tiempo a aburrirnos: se carretaba la leña para la cocina , el agua para lavarse y hacer la comida, la ropa al lavadero, luego la regabamos y al final la recogíamos. Dar de comer a los animales, cuidarlas vacas y encontrarse con los vecinos correteando y jugando… ¡ Que cambio !

Los juguetes de hoy y los juegos son aparatejos que nos tienen las casa llenas de objetos , ruidos por doquier y niños aburridos. Bueno, hai de todo , gracias a Dios.

Pero apelando a la RAZÖN creo que nos estamos pasando y mucho a nivel cotidiano. Sobre todo hablando de niños pequeños enganchados a maquinitas un montón de horas, con la vista fija  y que  no escuchan, están fuera del entorno familiar.

Los escolares que ya no precisan reglas de ortografía, una letra legible, un orden en la exposición de un determinado texto… A mayores los cambios de planes según el partido de turno que gobierne.

Está además la costumbre o más bien vicio que ya tienen las crituras de distintas edades que no se relacionan o no saben vivir si sus congéneres no les compran el aparatejo más sofisticado de última generación. Se sienten desgraciados.

La reacción familiar, antes de que tengamos una depresión por delante es ,endeudarse si hace falta ,pero hay que comprar el aparato. Y se acaba la convivencia, ya no se habla .

Todo ello trajo su parte negativa: personas sin trabajo sustituidas por máquinas. personas tambien analfabeto-tecnológicas a las que había que formar.

Se pagó un alto precio con los cambios  que hubo que hacer  y no siempre se hizo bien.

No se analizan los pros y los contras y las personas acaban sufriendo las consecuencias.

Como siempre existe el empresario de turno que tiene que dar salida a todos los aparatos; Y el gobernante de turno que , sin escrúpulos implanta su estrategía.

Se siente uno juguete de otros cuantos que te meten en la rueda de la que no puedes salir. El dios tecnología nos volvió tontos a unos y listos a otros.

Como dice mi padre: – Falla el factor hombre – que ponga cada cosa en su lugar usando la RAZON.