El o​lv​i​do

El olvido es una pena llena de rencor, el olvido nunca olvida el dolor, el olvido quizás olvidó todo mi amor, pero te juro que no olvido lo que el pasado se llevó.

Tu recuerdo tan latente alimenta el alma para escribirte, tus reflejos independientes de mis pensamientos crean vacíos de amor y olvido en mi alma, cómo olvidar tu esencia si está tan impregnada en mi como la conciencia, cómo olvidar tu aroma si es tan parte de mí que sin él no podría no ser yo.
¿Por qué no regresa y me enseñas a olvidar el olvido? ¿por qué no regresas y creas de nuevo un mundo conmigo? Entiende que sin ti este mundo es tan vacío y sin sabor como un caldo sin su sal, es tan inerte y poco valiente las ganas que tengo de olvidarte.
Jamás olvidare tu aroma impregnado en mi ser, porque estoy seguro que más que un amigo yo pude ser, porque tu cuerpo lo pude recorrer y pude andar por tus lagunas Angelicales bañadas en cristales.
Mostrando el corazón tan dentro de la razón me sacaste del vacío, porque lo que has hecho en mí no lo he encontrado nunca, y más allá de toda culpa quisiera volver a recorrer tu cuerpo hermoso de mujer y bañarme en tu fragancia para sentir la distancia de este puto mundo vacío, porque tu llenas el mío, cómo nunca lo imaginas y más adentro del estima que tú me puedes tener yo me quiero enloquecer en tu suave anochecer y volver a recorrer, tú delicioso cuerpo de mujer.