A ella le gusta caminar por la ciudad, escucharla, observar todas las cosas y descubrir las historias que esconden tras ellas. Muchos le dicen que es un lugar peligroso y hostil , como una jungla de asfalto llena de fieras salvajes que esperan al acecho por una presa fácil como ella, pero Sonia sabe ver lo bueno de las cosas y su ciudad le parece un lugar mágico, encantador con muchos misterios por resolver.
-Si te detienes un poquito y escuchas con atención seguro que puedes oír el corazón de la ciudad , tiene un ritmo continuo, casi como el sonido de las olas.- Le decía a su madre que solo sonreía diciendo:- ¡ay hija! mejor apúrate si no quieres llegar tarde a trabajar- Ella se ponía en marcha como un cascabel resonando por todo el edificio, sus vecinos no podían entender que alguien estuviera tan de buen humor a esas horas de la mañana y en ese lugar donde a veces parecía que ni el sol se levantaba.
El jardín era para ella el corazón de la ciudad, podía escucharlo palpitar en cada sonido, era el remanso de paz en que descansaba de su simple rutina ; algo tan sencillo y perfecto a la vez que encerraba la combinación justa entre naturaleza y urbanidad, entre fantasía y realidad.
Cada día justo antes de comenzar a trabajar el canto de los pájaros, el rumor de los árboles y el vaivén ajetreado de la calle le daban la fuerza necesaria para continuar, Ser cajera en aquel banco no era precisamente lo que había deseado , ella era artista, soñadora crónica y amante de la ciudad ,pero al menos ese trabajo pagaba las cuentas y le daba la oportunidad de desarrollar una de sus pasiones: ver siempre gente nueva e imaginar sus historias.
El necesitaba enderezar el camino las cosas que se había visto orillado a hacer hasta el momento no eran motivo de orgullo , pero tenía que sobrevivir, así que ,un día más atravesó el jardín corriendo a toda velocidad y se impactó contra ella ,ambos cayeron al piso medio abrazados; era bonita ,en otro momento la hubiera invitado a salir, pero no tenía tiempo, lo estaba siguiendo, tampoco podía irse, estaban demasiado cerca, podían reconocerlo; aquel era el escondite perfecto , se acurruco en sus brazos y comenzó a besarla con toda la pasión que había guardado y ella se entregó a la fantasía de haber encontrado al príncipe encantado , pero el embrujo duro tan solo un instante fuerzas extrañas los separaron y antes de recuperar la cordura oyeron en la distancia una voz que decía :
– ¡Ratero! ¡Levántate, estás arrestado!
Ya no había más rumor de árboles ni pálpitos en las calles ,se quedó sentada en el suelo todavía envuelta en aquel trance , las patrullas aullaron al alejarse.
– ¡No lo puedo creer!- musitó al romper en llanto, el corazón de la ciudad se había quebrado.
FIN
JARDIN HIDALGO EN AV AZCAPOTZALCO CIUDAD DE MEXICO
OPINIONES Y COMENTARIOS
comments powered by Disqus