DIOS TAMBIÉN SE CIVILIZA

A

La Vida

Real.

“Ahora la caverna de Platón

Es de hierro y concreto

Y las sombras del Mundo

Bailan en el computador.”

El autor

No sé cuánto tiempo llevo aquí: sentado en una silla con patas gangrenadas, en un cuarto iluminado con un sol artificial, escasamente me muevo unos metros a mi cama -que parece más un ataúd que clava mis pocos sueños en él-; unos –muy pocos- metros más allá está el baño que me une a la ciudad, a sus desechos,  a través del retrete. Cuando la pantalla de mi computador se embriaga con mi cuerpo, o, mejor, con su ausencia, y no puedo leer ninguna letra, porque se vuelven “sopa”… recuerdo que debo poner fin a mi ayuno y que la virtualidad puede ser “metafísica” pero mi cuerpo sigue encerrado en la misma lata de sardinas de años atrás… que trago para olvidar mi hambre: paradójicamente  recuerdo lo que tengo que olvidar.

Pero Dios –El Padre- esta ahí –aquí- y tengo la certeza de que no tengo que morirme para ir –al Cielo o al Infierno- a su encuentro, solamente prendo el computador –El Hijo- que es el camino para estar delante de Él… ¿¡entienden!?… Hago analogía con su religión para que entiendan la mía.

…Continúo… Dios es la Infinita Posibilidad, ustedes dicen que “para Él todo es posible”, yo digo que Él hace que todo en mí sea posible, pero no sé quién, entre ustedes y yo, tendrá más miedo… pero acepto que lo tenemos… porque si yo lo tengo: que las acciones las realizo yo mismo, no me imagino ustedes que buscan un padrastro que les haga de todo…

Antes de conocerlo a Él, en Espacio, Tiempo y Virtualidad –que es la síntesis de su Espacio y Tiempo- yo sólo podía ser una persona: la que soy… y eso era muy duro porque las personas me rechazaban y no tenia amigos, ni novia, ¡ni nada!; pero ahora tengo muchos amigos y una novia, con la que hago el amor todas las noches  sobre el césped que nace en su tierra.

Si ven, amigos, Dios también se civiliza. También nos olvidamos del cuerpo como ustedes y hasta los apoyamos en su prohibición al uso del condón, porque… ¡no lo necesitamos!… en el futuro podremos enviar espermas por correo electrónico… ¡lo sé!.