Las visitas de Mamá

Mami:

El recuerdo y la nostalgia, llevados por una emoción intensa, crearon de tu hermoso rostro esta espléndida postal. Amoroso te la envío, perfumada, de la mano de un poema que hace poco te escribí.

 Las visitas de Mamá

Solo verte abrir los brazos, regalando tu sonrisa

Me bastó para curarme las heridas de tu ausencia,

Compensando con tu abrazo, tu calor y tu presencia

Lo que tanta falta me hace y que de ti mi ser precisa.

“¡Te acordaste del café!”, comentaste entusiasmada

Al mirar tu vieja mesa en el salón de mis recuerdos

Un salón lleno de aromas, de nostalgia y sentimientos

Que otra vez te abrió sus puertas, festejando tu llegada

Soy feliz cuando te pienso, tan feliz como fui entonces

Continuas omnipresente, en mi mundo, en forma etérea

Y no importa que en mi vida ya no puedas ser materia

Si cuando te lo requiero, tu te estás de once a once.

Eres causa que me impulsa y por la cual mi amor te invita

Eres mi alma que contempla a tu alma fascinada

Y eres vida tan querida y añorada por mi vida

Que de tanto recordarte, comprensiva… ¡Resucitas!