La leyenda del lobo ·
Tocaba el piano sin partituras, con la mirada perdida en algún punto muy dentro de su alma, transformando sus visiones en melodías extrañas, siempre tan pausadas, con silencios cargados de deseos enjaulados. Nadie entendía muy bien qué era lo que tocaba pero la dejaban hacer pues era parte de su espectáculo. Ni las riñas de...