«La Ilusión En El Barco De Roger»

Para lograr mucho se necesita de esfuerzo y mucho, esto decía el Capitán Roger siempre. las cosas fáciles vienen y se van igual.

Soy el capitán Roger, y espero que te emociones como yo siempre lo estoy, y con tan solo contarte mientras yo lo vivo cada día.

Despierto, voy a la cocina y hago mi café todas las mañanas, siempre tengo algo que hacer para divertirme y comenzar mi día como si fuera el ultimo, mi trabajo como Capitán existe desde hace 11 años, antes era el marinero Roger. ¡Como pasa el tiempo! Tengo 47 años y me siento como de 24.

Estuve en desorden un tiempo emocionalmente, y te contare el porqué.

Soy el Capitán que alza siempre su mirada hacía al mar y enamorado del azul navy que es, me reluce el rostro de gloría cuando tomo el timón, no hay ancla que me detenga, los tiburones salen huyendo de mi cada vez que zarpo, el sol me seguí a donde yo quiero, y cuando culmina el día, la luna me vigila con cuidado.

Feroz es mi persistencia y mi ánimo, los sueños me persiguen, no porque me llamo Roger, sino porque se enamoran de las personas como yo, si! de esas que se dan a carcajadas de la rutina.

Un miércoles antes de zarpar por el muelle pasó una bella joven de pelo Rubio y Rizado. Cada Miércoles y Viernes pasaba por el muelle la joven, y anclaba su mirada hacía al mar, le gustaba la briza que le pegaba en su rostro, desde ese día, yo inicie los Miércoles y los Viernes a mirarla, como un niño mira a un helado, ¡sentirme así era extraño!

Muy atentamente y con desesperación miraba el reloj para acercarme a mirar a la bella joven, y me encantaba mirarla como yo miro al mar sin lugar a duda.

Me dedique a explorar de su luz que reside en su sonrisa, es porque nunca me paso por la mente medir la duración de mirarla en pleno hobby de Capitán.

Recuerdo ese día cuándo la joven llego con su novio, se me despeino el sueño de amarla un día y de prometerle que el mar y las estrellas serian para ella, ese día la ilusión fue un hoyo en mi corazón, algo comenzó a hundirse dentro de mí.

Pero yo el Capitán Roger aprendí del profundo mar de sentimientos que hay en el corazón.

He visto islas, paisajes hermosos y aquella joven, todo esto es para llevar cuando me muera. Soñé, viví y me ilusione, tuve toda clase de glorias.

Mi historia es para que aprendas a domar de las tremendas olas de dolor que la ilusión puede producir.

Sigo siendo el amante del inmenso mar, y del perseguido sol y la luna.

¡No olvides lo que eres!

El Capitán Roger.

– Hugo Boror.