«He aquí en el recoveco de mi mente, abrumado por las emociones que no me permiten expresar en su totalidad mi tortura mental. Encontrando escapatoria; o tal vez mi lugar en un mundo de orates, deambulo como trovador en talleres literarios.»
— No te compliques la narración Ruperto — me dijo el Profesor.
Pero…no me encuentro inspirado, siento un caos en mi cabeza — pensé.
—No necesitas buscar tu rima perfecta, solo desanuda las falacias que te consumen y fluye sin huir— agregó sonriente.
OPINIONES Y COMENTARIOS