¿Por qué?

Quedamos a las 16:00, ¿por qué no hay nadie aquí todavía? No, era un Peugeot blanco, no gris, ¿quieres dejar de intentar meter las maletas en el coche de esa señora? Que la pobre está asustada. Venga, que nos vamos por fin. Claro que se puede comer, pero intentando no llenarme de migas TODO el coche. ¿Es necesario que pongas reggaeton a todo trapo? Lo digo por empezar a llorar ya o esperarme otro rato. ¿Otra vez al servicio? Claro, no sería un buen viaje de 2 horas sin al menos 4 paradas… ¿Vomitar? Espera que paro. ¡En los asientos no por favor! ¡Y dile al guiri que deje de decirme cosas en inglés,  que no lo entiendo y me está poniendo nervioso! Menos mal que es el primero que se baja.

Para calmar los nervios me da por pensar en positivo. Estoy seguro que si paramos una quinta vez y los convenzo para bajar puedo acelerar lo suficiente para perderlos en el camino. ¿Cuánto es la denuncia por abandonar pasajeros en la A4? Vaya viajecito… ¡no vuelvo a compartir coche!

Venga, comencemos el reparto. ¿Qué pintará un inglés en mitad de una dehesa? En fin, al menos creo que era donde queria estar, no lo veo correr detras del coche.¿Dónde te viene bien que te deje a ti? Ya que calé el coche mientras estabas en el servicio por quinta vez y me alcanzaste, llevarte a tu casa y que te aguante quien te quiera es lo menos que puedo hacer (si, necesito las 5 estrellas de valoración). Espera, esa dirección me suena ¿no serás el hijo de Isabel? Claro que la conozco, yo soy el David, el hijo de la Carmen. Hace años que no vienes al pueblo ¿no? Claro, por eso me sonaba tu cara, anda que cuando se lo diga a mi madre. ¿Te acuerdas cuando en verano íbamos a buscar renacuajos al arroyo? Si llego a saber que 15 años después me montas este viaje te dejo allí perdido. ¿Una cerveza esta noche para ponernos al día? Venga, por qué no, total no hay mucho que hacer en el pueblo de todas maneras.

Creo que ahora recuerdo por qué comparto el coche…