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Aleatorio Publicaciones más recientes Autor [A-Z] Más prolíficos
Se muestran las dos últimas obras publicadas de cada autor. Para ver todas sus aportaciones, accede a su perfil pinchando en su nombre.
Denise Mendez
O. MEJIA
MELIZA Y EL CENTURION ROJO Ilustración y prosa de Oswaldo Mejíar 6 lecturas
Video HAMBRUNA (copia) 40 lecturas
maximo caminero
Colonias perdidas. 26 lecturas
La riqueza distrae el alma. 32 lecturas
CESAR LORQU
La femme derrière le soleil en Perder la inocencia 105 lecturas 15 puntos
Me quedo contigo 41 lecturas
Javier Reiriz
La pelota roja en Perder la inocencia 398 lecturas 93 puntos
El ente revelador en Preocupaciones de un lector de Kafka 376 lecturas 38 puntos
Noemi Medina Jimenez
un Pan de un dia , MANá. en Historias del pan 408 lecturas 23 puntos
el respeto de elogiar 117 lecturas
LUISMA LUMAN
El Baile 26 lecturas
Las Mujeres en el Rio 15 lecturas
M.F..O.R
Rutina 11 lecturas
Destino amigo 7 lecturas
G.H.ELLEN
INCIERTO 81 lecturas
Bala Perdida 88 lecturas
Rosana Conejo Balbontin
EL TRATANTE DE SECRETOS en El año sin primavera 83 lecturas 0 punto
ESTOICISMO en Perder la inocencia 368 lecturas 49 puntos
Carmina Quiralte Fuentes
Pateen 47 lecturas
Linus 47 lecturas
Travesía Literaria
Título: Cuando la Vida te Sigue Pidiendo Pruebas Sinopsis General: Manuel es un hombre de gran fortaleza que ha aprendido a vivir con el vacío de no conocer a su hija, Amaiia, pero jamás se ha rendido en su lucha por alcanzarla. Casi tres años han pasado desde su nacimiento, y aunque la distancia y las circunstancias lo han mantenido alejado, ella sigue siendo el centro de su universo. Su historia es un testimonio de resiliencia, amor inquebrantable y la convicción de que, aunque la vida ponga pruebas difíciles en el camino, siempre hay una manera de superarlas. Su mayor apoyo es Diana, su pareja, una mujer de admirable fortaleza que ha sido su sostén en los momentos más difíciles y de quien hoy se siente profundamente orgulloso. A pesar de no haber tenido una infancia feliz como cualquier niño, Manuel ha demostrado que su gran corazón y su determinación pueden romper cualquier barrera. El eco de la ausencia : Manuel despierta cada día con la misma pregunta: ¿Cuándo podré conocer a mi hija? A través de cartas nunca enviadas y pensamientos nocturnos, narra su dolor y la lucha constante con la incertidumbre. La carga invisible : Aunque aparenta ser fuerte, Manuel lleva una batalla interna. Explora su infancia, sus miedos y cómo la vida le ha enseñado a resistir sin quebrarse. El sueño que nunca muere : Cada proyecto que emprende tiene un solo propósito: construir un futuro donde Amaiia y él puedan estar juntos. Su determinación es inquebrantable, aunque las noches de duda sean largas. Cuando el amor es un faro : Diana se convierte en su apoyo más grande. A pesar de sus propias luchas, ella lo impulsa a no desistir y a creer que la vida tiene algo hermoso reservado para él. Luchando contra la corriente : La burocracia, la falta de oportunidades y los fantasmas del pasado intentan desmoralizarlo. Sin embargo, Manuel encuentra maneras de reinventarse y seguir adelante. Las lágrimas que no se ven : Un día, Manuel se permite llorar. Acepta que ser fuerte no significa ocultar el dolor, sino enfrentarlo y convertirlo en motivación. Caminos inesperados : Un encuentro fortuito con alguien que ha pasado por algo similar le brinda una nueva perspectiva. A veces, la vida pone en el camino personas que se convierten en guías sin que lo sepan. La decisión que cambia todo : Cansado de esperar, decide dar un paso arriesgado. No importa cuánto cueste, ha llegado el momento de buscar a Amaiia. A un paso del destino : La ansiedad lo consume, pero también la emoción. Está cada vez más cerca de ese instante con el que ha soñado durante años. El primer abrazo : Cuando sus brazos finalmente rodean a Amaiia, todo el sufrimiento del pasado se desvanece. Es el momento más significativo de su vida. Aprendiendo a amar de cerca : Ahora que puede compartir tiempo con su hija, descubre que la paternidad es un mundo lleno de retos, pero también de alegrías inmensas. Las cicatrices del alma : Aunque el presente es prometedor, Manuel debe sanar las heridas del pasado. Comprende que para dar amor pleno, primero debe reconciliarse con su propia historia. Creando nuevos recuerdos Cada día con Amaiia es un regalo. Cada risa, cada pequeño gesto es un ladrillo en la construcción de una nueva vida juntos. Cuando el destino recompensa la perseverancia Reflexiona sobre todo lo que ha pasado y cómo, a pesar de la adversidad, nunca dejó de creer que su sueño era posible. Sabor sin fronteras, amor sin límites Manuel finalmente alcanza todas sus metas: logra la estabilidad que siempre soñó, abre su propio negocio, una sandwichería de fusión chileno-peruana llamada “Sabor sin Fronteras”, y lo más importante, puede compartir su vida con Amaiia y su familia. Con una sonrisa sincera, comprende que cada prueba valió la pena y que la verdadera felicidad está en las personas que ama y en el esfuerzo de nunca rendirse. FIN.. Autor.RJVC 12 lecturas
Cartas a Amaiia: El amor que nunca se apaga Sinopsis: Raymond nunca imaginó que la vida lo alejaría de lo más sagrado que tenía: su hija, Amaiia. Ahora, sin poder verla crecer, sin poder abrazarla cuando llora o celebrar sus logros, siente que su corazón se parte en mil pedazos. Pero el amor de un padre no se apaga, ni con la distancia, ni con el tiempo, ni con los errores. Por eso, le escribe. En cada palabra, en cada carta, Raymond le entrega lo único que aún puede darle: su amor inmenso y eterno. Le habla de los días que nunca podrán compartir, de las risas que se quedaron atrapadas en su pecho y de las lágrimas que ella nunca vio, pero que cayeron en su nombre. Es un testimonio de amor, de arrepentimiento y de la promesa inquebrantable de un padre a su hija: "Amaiia, aunque no pueda estar contigo, te amaré hasta el último latido de mi corazón." 1: Cuando supe que existías Raymond recuerda el momento en que supo que sería padre. El miedo, la alegría, las promesas que se hizo a sí mismo y a ella antes de conocerla. 2: El día que llegaste al mundo El nacimiento de Amaiia fue el instante más hermoso y aterrador de su vida. La describe con detalle: sus manitos diminutas, sus ojitos llenos de luz, el sonido de su primer llanto que marcó su alma para siempre. 3: Mis errores, nuestra distancia Raymond abre su corazón sin miedo. Habla de las decisiones que lo alejaron, de los momentos en que pudo haber elegido un camino distinto y no lo hizo. No busca justificar nada, solo decirle la verdad. 4: Tu cumpleaños sin mí El 3 de marzo, Amaiia cumple 3 años. Raymond imagina la fiesta que nunca podrá darle, el abrazo que no podrá entregarle, las palabras que quisiera susurrarle al oído mientras le dice cuánto la ama. 5: Los abrazos que no te di Cada día que pasa sin ella es un día que se lleva consigo un "te quiero", un "te extraño", un beso en la frente y una caricia en su cabello. Este capítulo es un desahogo: la tristeza de un padre que siente que el tiempo le roba a su hija. 6: Si estuvieras aquí Raymond sueña con un solo día con Amaiia. Imagina llevarla al parque, enseñarle a jugar, cantarle una canción antes de dormir. Cierra los ojos y la ve, la escucha, la siente… aunque la realidad le grite que ella está lejos. Capítulo 7: El amor que nunca entenderás (pero siempre sentirás) Raymond le habla a su hija sobre el amor que los une. Un amor invisible, silencioso, pero tan fuerte que ni la distancia ni los años podrán borrarlo. Le dice que, aunque no pueda verla, siempre la lleva en su corazón. Capítulo 8: Mis consejos para ti, mi pequeña estrella ¿Qué le diría si pudiera guiarla en la vida? Raymond le escribe sobre el valor de la bondad, de la honestidad, de la fortaleza. Son palabras que espera que algún día le lleguen y la acompañen siempre. Capítulo 9: Perdóname, pero nunca dudes de mi amor Raymond sabe que algún día, cuando Amaiia crezca, podría preguntarse por qué su padre no estuvo ahí. En este capítulo, le dice cuánto lamenta su ausencia, pero también le ruega que nunca dude de cuánto la ama. Capítulo 10: Mi última promesa En la última carta, Raymond le deja a Amaiia su promesa más grande: "No importa dónde estés, no importa cuántos años pasen, si alguna vez necesitas a tu papá, solo mira el cielo. En cada estrella, en cada rayo de sol, en cada latido de tu corazón… ahí estaré." Fin Autor:RJCV 19 lecturas