Fuera de la escuela primaria de la ciudad, hay un pequeño bosque, es mi lugar favorito para pasear de todos, paso horas divagando sin rumbo entre los arboles solo viendo a los animalitos pasar.
En medio del bosque hay un gran árbol que me recuerda al que se menciona en las historias que nos cuenta la maestra, historias sobre dioses con poderes de rayo y caballos con alas. Mis amigos y yo veníamos al salir de clases veníamos aquí a jugar, escalábamos los arboles, jugábamos a las escondidas y hacíamos casas para los duendes que decían que vivían aquí, nunca vimos uno, pero yo sé que están por ahí, una vez me pareció ver una pequeña cosa correr entre los arboles, tal vez solo son muy buenos escondiéndose de mi.
Mis amigos hace tiempo ya no vuelven al bosque, soy el único que lo visita, pero eso no me pone triste por que disfruto estar aquí, buscando a esos duendes aun. A veces una mujer viene cerca del árbol, habla sola, a veces esta triste, a veces parece estar contenta, a veces llora; me gustaría acercarme a ella, pero no la conozco y me un poco de miedo, y me pone incomodo, solo desearía que no llorara tan cerca del lugar donde caí y morí…..
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