¿Y si…?

¿Y si vuelvo a verte sin que haya tormenta?

saciadas las ansias de nuestra alma hambrienta,

deseos satisfechos de curiosidad,

sueños más cercanos a la realidad.

Volvernos a ver en otro momento,

cuando haya aclarado nuestro firmamento,

saber qué buscamos, con tanta certeza,

que en nada interfiera la antigua tristeza.

¿Y si coincidimos en tiempo distinto?

sin que sea el motivo saciar el instinto,

sin nada que colme los cinco sentidos,

sin influjos previos, por amor movidos.

Tener otra cita en un tiempo lejano,

igual si es que hubimos tomado otra mano,

estar frente a frente en un momento dado,

más fe en el futuro, con menos pasado.

¿Y si lo intentamos después de una pausa?

cuando se disipe lo que pena causa,

que esa turbación que provoca mella,

pueda ser borrada sin que deje huella.

Haciendo más cortas todas las distancias,

más por decisión, menos circunstancias,

no ver al reloj, dejarlo de lado,

el tiempo jugando como nuestro aliado.

¿Y si postergamos toda esta belleza?

sin tanta zozobra, tal vez más certeza,

tras haber probado de la ausencia miel,

más por el amor, menos por la piel.

Cuando lo importante no sean las caricias,

cuando las promesas no suenen ficticias,

que a nuestras palabras no las lleve el viento,

sin alegoría, solo el sentimiento.

¿Y si renunciamos a esta despedida?

Porque yo te quiero con toda mi vida,

¿Y si me despojo de este tonto orgullo?

Porque eternamente seré todo tuyo.