Déjate embrujar…

Tal vez…

Tal vez es culpa de las estrellas

Que me embriagaron con su luz y ahora

Las necesito para guiar mi camino.

Tal vez es culpa de los libros

Que me atraparon con sus líneas

Y me hicieron preso del mundo de la fantasía.

Tal vez es culpa del universo, majestuoso e imponente

Que sobrepuso en mi ventana vastedad de infinitos

Alardeando de su belleza en el firmamento.

Tal vez es culpa de la música

Que ha estado desde mi primer suspiro

Y aún no renuncia a secar mis lágrimas en la decepción.

Tal vez es culpa es culpa del café

Al que le hablé de mi primer y mi último amor.

O tal vez, no es culpa del universo ni de la música,

Ni del café, ni de los libros ni de las estrellas.

Tal vez sea culpa de mi corazón, que decidió amar a una mujer que supo ser

Estrellas y libros, universo y café

A la vez…



Alguien que le diga

Alguien que le diga que las rosas ya no quieren florecer

Que los pájaros no quieren cantar

Y el sol ya no quiere salir de nuevo.

Alguien que le diga que no puedo aguantar más,

Que mi corazón dejará de palpitar

Y que mi alma desistió de su brillo.

Alguien que le diga que su felicidad es mi felicidad,

Que mi sonrisa es verla alegre…

Pero mi corazón también anhela ser feliz.

Alguien que le diga… que mis ojos están llenos de lágrimas

Que mi almohada ya no quiere escuchar más lamentos

Y que mi soledad… Tampoco quiere escucharlos.

Alguien que le diga, que le di mis mejores momentos

Que mi mente nunca olvidará su figura,

Y que mi corazón siempre la seguirá amando.

Alguien que le diga!

Que el silencio lo ha dicho todo…



Bésame

La besé, lo hice

sus labios rozaron los míos

en un ir y venir.

La besé,

Porque su lengua junto con la mía

Fueron una a la vez.

La besé, como lo imaginas,

Pero yo sólo lo hacía

Pensando

En que la dueña de esos besos eras tú.

Y así abrí los ojos, sorprendido

¿Cómo puede alguien tocar mis labios tan fácil… pero no mi corazón?



Soledad

Y aquí me encuentro

Entre un mar de ideas

Y un corazón roto.

Desolado

Dando sentido a mi poesía

A mis escritos, a mi vida.

Pobre plumilla,

Se ha quedado sin inspiración

Pobre mi alma,

Se ha quedado sin amor

Pobre de mí

Me he quedado sin ti.



Quiero hacerte el amor de mi vida

Quiero hacerte el amor, mi vida

Y llegar hasta lugares de tu cuerpo inalcanzables

Que por más de que sean a simple vista muy notables

Quiero descansar sobre esa figura perfectamente construida.

Quiero escalar tus montañas altas como el cielo

Y llegar hasta la cima de tu increíble belleza,

Y sin ninguna duda, te miraré y con certeza

Afirmaré que me embriago con el olor de tu pelo.

Quiero desnudarte por completo a mi lado

Y así admirar tus variadas imperfecciones

Tan perfectas como tal vez en muchas ocasiones,

En mis sueños a dormir me tenían obligado…

Quiero obtener las llaves de tus puertas,

Y adentrarme en un mundo de infinitos y ternura

En donde el corazón decida entregarse con locura,

Y nuestras almas no tengan que mandarse más alertas.

Quiero hacerte la guerra, en este justo instante

Aclarando que no me interesa ser equitativo

Robarte un beso que mantenga nuestro amor vivo

Y una caricia que mantenga nuestra piel flamante.

Quiero escuchar tu canto, esa melodía arrulladora

Melodía que solamente viene de tu corazón

Este al sentirse amado, cantará como ruiseñor,

Y su canto no tendrá ni límite ni hora.

No cualquiera el amor te haría

Pero no quiero tomarlo como adicción

Más bien precisamente esta es mi condición

Solo quiero hacerte el amor, de mi vida…

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