Querido hermano,
¿Te acuerdas de aquella travesura de Tita Elena?
«Una vez vino un comerciante con un burro a traer víveres al caserón que hay junto a la iglesia, lo dejó amarrado en la puerta mientras llevaba los víveres dentro. Tu tía, sin mas, se montó en el borrico y se fue al campo a dar un paseo con él. Se llevó todo el día ¡ burro para arriba! ¡burro para abajo! Hasta que anocheció.
El comerciante, al salir y no ver su burro amarrado, exclamó:
– ¡Maldito burro, ya se ha escapado otra vez!
Una vecina, de estas que están pendiente a todo, menos a lo suyo, le dijo:
– ¡Señor! Su burro no se ha escapado, Elena iba montada en él dirección al campo.
Víctor, ese era su nombre, un tipo rudo, con bigotes anchos, una coronilla sin pelos por donde decía que le daba frío en invierno, corpulento y de muy mal humor, dijo:
– ¡Maldita chiquilla! «
Todos reíamos, luego, unas lágrimas de nostalgia brotaban de los ojos de mamá.
Nunca te conocí, te marchaste antes de que yo naciera, pero vives dentro de mi, eres mi «Ángel de la guarda»
Gracias por cuidar de mi.
Te quiero hermano.
Destinatario: Manuel Torre Lepe
Dirección: El corazón, s/nº
Rmte.: Manuela Torre Lepe
OPINIONES Y COMENTARIOS
comments powered by Disqus