Los sentimientos que ésto ha provocado en mi persona son diversos pero casi siempre tienen que ver con la frustración.  El desconocimiento de tantas cosas lo hacen a uno tán diminuto que por supuesto que bien se puede comparar a la tecnología con algo supremo. Ésto empieza cuando yo voy terminando, cuando mi sed de descubrir y aprender están en el ocaso. 

Pero no importa, éste ser supremo se monta sobre mi y me involucra involuntariamente a rendirle culto a pesar de mi renuencia.  La primera vez que vi una computadora en mi oficina me llené de terror, imagine a un ser extranormal en mi escritorio, no tenía ni idea de como encenderla y en el fondo ni quería averiguarlo, que tal si me electrocutaba!  Así las cosas determiné que la jóven asistente que lucía tán emocionada se hiciera cargo del bulto que ésto representaba.

Por supuesto que ella y su juventud de la mano, se hicieron cargo del aparato con una maestría inexplicable. Al ver esa relación tán cercana cuestioné a  la chica  si había tomado una maestría con doctorado en las artes computacionales y contestó desenfadadamente que no.   Como que no? entonces ella es super dotada o que demonios? porque tanta felicidad?

Obligadamente tuve que enfrentarla y a pesar de los años transcurridos desde nuestro primer encuentro aún no hemos logrado establecer una relación amistosa.  Cada día que me siento frente a ella automaticamente se presentan nuevos retos, nuevos vocablos, nuevos programas.  Conforme mas contemporaneo es el modelo más orificios posee para introducirle dicos, disquetes, usbs  cables y sabrá Dios que más.

Voy enterándome con lentitud que los discos han pasado de moda, que las pelis no hay que irlas a comprar, que las agendas son obsoletas,  que los carteros deben de tomar la jubilación por falta de actividad, que en las oficinas hay mas compus que personas.  Ésto me  hace reflexionar y siento nostalgia por los archivos enormes, llenos de expedientes, de hojas de papel, de olor a cartones y papel.  Mmmm que delicia! que cálido!

El internet merece mis respetos tanto como el mar y sus profundidades, resulta tan desconocido y desmesuradamente inmenso que no puede mas que hacerme temblar ante tantas opciones, intento diariamente proveerle mis afectos, darle lo mejor de mi pero, cuando creo que voy ganando esa batalla el siempre se adelanta  y a  pasos agigantados. Como ser humano que todo quiero dominar con el sr. internet, he fracasado! no logramos amarnos con esa intensidad.

Llegaron los telefonos celulares, realmente me parecieron una joya invaluable.  Todo funcionaba bien en tanto solo tenía la utilidad de cualquier teléfono normal.  Ah! pero alguién determinó que había de dotarseles  con todo lo imaginable.  Camaras fotográficas, grabadoras de voz, radio, tele, internet, etc.  No suficiente los teclados son los denominados touch, mismos que mis dedos torpes no permiten hacer eficiente mi escritura ni ninguna función.  La agenda de contactos se encuentra en su memoria no en la mia!  Resulta todo un problema que alguién me solicite información de un número telefónico, incluido el mio! Imposible, ya ni eso sé!

No hablemos del perjuicio que ocasiona la pérdida o robo de un celular, pierde uno la mitad de la vida, como llamar a casa? si no recuerdo el teléfono!  Pierde uno a cantidad de amistades. 

El celular es de ésos artículos que no se bién como definirlos.  Por un lado son de suma utilidad ya que te dán la ocasión de nunca estar fuera del alcance de los seres importantes, pero, tambien de los no tán importantes.  Así mismo son buenísimos para evitar las conversaciones entre padres-hijos-padres, parejas, etc  Es como ese utensilios necesario pero peligroso.  

Con un movil ya nada espera, cualquier duda puede ser resuelta de inmediato, no hay que correr a la biblioteca ni preguntarle al vecino como llegar a nuestro destino, cualquier duda puede ser aclarada.

Tocante a las redes sociales lo más que puedo decir es que resultan adictivas.  Hoy día quién no esté registrado en una de tantas, simplemente no existe, estará fuera del alcance de sus amistades, familiares y seres queridos, incluso de la vida laboral.  Al igual que el celular tiene sus armas de doble filo, útil para encontrar a los amigos y seres que extrañamos y que por la distancia la vida los separó y desconocemos su paradero pero absolutamente inapropiada si queremos huir de alguien a quién no queremos ver en lo que nos resta de vida.

La terminología es desconocida, he tenido que esforzarme bastante por comprender las cualidades que tiene cada artefacto nuevo que llega al mercado, el vendedor se esmera tremendamente por convencerme para comprar cualquiera de ellos y aunque aprecio su valor, más de la mitad de las bondades que ofrece,  simplemente no las comprendo y  si determino cuestionarlo sobre cada una de ellas, con el fín de ilustrarme, acabo peor y con dudas que me pesan más que una losa.

El punto amigos, es que la tecnología nos alcanza con sus garras extendidas y queramos o no es como un imán que todo atrae y que indiscutiblemente la vida me ha aleccionado  al ponerme en la cara que nunca llegará la edad en la que digamos que estamos en el ocaso del aprendizaje como al principio de este relato lo pensaba.  

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