Te regalé una bonita sonrisa de Joker, ¡No tenía más!
Un feo y contrahecho Joker como yo no tenía posibilidad de enamorar a nadie y menos a la Reina de Diamantes.
Los cuatro reyezuelos del Condado pretendían su mano, ¡Los odiaba!
Despechado busqué alianza con los Ases para vengarme, en la última mano logramos derrotarlos con un potente Full.
Ordenaron mi detención por subversivo, ahora, aguardo la madrugada para morir decapitado.
Afortunadamente, cansados de jugar nos guardaron en nuestra cajita, el resto del viaje sera junto a ella amándola en silencio.
¡En esos instantes, ocultos del mundo, valemos lo mismo!
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