Su pregunta es de lo más estimulante.
Nos separan tres mesas en este taller de escritura.
Me muevo hasta la siguiente mesa, desde donde observo mejor.
Me ha mirado.
Sonríe, también. Quedan dos mesas. Llego a la penúltima, avanzo hasta la última. No queda nada. Me siento ante ella, pregunto muy cerca.
Pero no es ella todavía, lo sé.
Nos separan tres meses, el tiempo de duración del taller.
Hoy empezamos.
Tendremos que conocernos mejor.
Vuelvo a mi mesa, recojo. Todos recogemos.
Pero espero.
OPINIONES Y COMENTARIOS