Y si la vida fuera como en todo cuento de hadas que se casaron y vivieron felices para siempre…
Pero no, en la vida real se casaron y vivieron
Unos felices, otros no tanto,
Unos para siempre, otros por un rato.
Y en ese vivir después del final del cuento de hadas
Llega la vida real
Pero no de la realeza
Sino de la entereza…
Una o mil historias que contar
Del trabajo de una mujer algo normal
Que decidió huir de un trabajo con un jefe tirano
Que la llevó a la locura y enfermedad.
Y al salir de esa tiranía
En búsqueda de una libertad laboral
Surgió la oportunidad de crear
La supuesta libertad empresarial…
Y cuando se sintió en la cima
Llegaron los asuntos de la legalidad
Los impuestos que pagar
Los empleados a indemnizar
Los clientes que soportar…
Un nuevo jefe no solo del hogar
También ahora de la sociedad
“Sociedad” de socios que deciden por igual
O de uno que domina sin parar…
Una empresa para administrar
Un día a día que no la llena en su totalidad
Una casa para organizar
Un sentimiento remoto de culpabilidad.
Unos empleados para dirigir
Una actividad de vigilancia sin parar
Unos hijos para criar
Un sinfín de asuntos cotidianos por solucionar…
Y así pasa su vida
Soñando con un mundo exterior
Que, aunque siempre lo soñó
No tomó las decisiones que debió.
Pero ella sigue anhelando
Cumplir sus sueños de volar
Ahora no con una maleta
Sino con cinco y cumplir su meta.
Porque al levantarse cada día
Y ver a su alrededor
Se da cuenta que ya no debe hacerlo solo por ella
Sino por los ojos que la miran con ilusión.
Pero mientras llega ese día
Está consciente que su vida seguirá entre
Su Jefe… Su Esposo…Su Empresa…Su Casa…Sus Empleados…Sus Hijos.
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