Confesión

¿Que por qué lo acuchillé, agente? No sabría explicarlo sabe. La noche estaba oscura y él salió detrás de mí por el callejón. Me asusté creo. Se me vino encima como una fiera. ¿Qué apunta usted ahí agente? ¡Ah!, mi declaración! Ah, eso es lo que le digo. Yo no podía, agente. El tipo sacó un cuchillo de la nada que reflejó en mi cara con la farola de la esquina. Yo se lo juro agente, que no lo conocía. Me defendí como cualquiera al que quieran arrancársela. No pude correr. Me atajó por la cintura y nos revolcamos en el agua verde y cochina, esa que va por la cuneta. Me desprendí de nuevo y vi el cuchillo tirado en media calle. Lo cogí para intimidarlo y que se fuera; pero el tipo siguió con su embestida. Se me abalanzó de un salto, y quedó así, de lado a lado, con la hoja traspasada entre el pecho y la espalda. ¡No! yo no sé tirar cuchillos. Lo tenía en la mano; debí ponerlo de frente cuando me vino arriba. ¿Apuntó eso agente? ¿Que vivía por aquí? Yo nunca lo había visto. ¿Está seguro agente? Yo creo que era un pandillero o asaltante, que me vio venir a esa hora y pensó en robarme. Ni que yo fuera presa fácil. ¿Que fue novio de mi hermana piensa usted? No agente no, si Rosita no puede tener novio; además, el tipo era mayor que ella, como de mi edad supongo. Sí, sí pero yo no sé quién era. Usted debe confundirnos. Esa escuela era muy grande, yo no conocía a todos. recuerdo agente; yo no sé nada de eso. A mí nunca me interesó esa candanga. No apunte eso agente, por favor, que… que me complica. No que yo recuerde… pero si usted lo afirma, así debió de ser. Yo, broncas tengo pocas. Lo mío sin las jevitas y las fiestas. Tiene razón agente que soy un tanto violento, pero le juro por ésta, que yo nunca he matado ni a una mosca. Pregúntele a mi familia y vecinos. O al del sector del barrio si así lo prefiere. Y apunte lo que digan. Yo soy un tipo legal pero esto me pone nervioso. ¡No yo no soy loco! Ni le tengo miedo a nada, pero esto me asusta. Venir a pagar por un degenerao. Sí degenerao también el muerto porque, aunque usted diga lo que diga; yo sé que ese tipo no servía desde que nació. Tanta bulla por un muerto que mejor está así. Yo tengo razón agente… créame y anote todo lo que usted quiera. Se lo digo yo. ¡Ese sujeto no servía desde chama, desde siempre abusaba de otros niños, se lo tuvo merecido!¡Nadie lo manda…!¡Ah que no! ¿Que no dice usted, agente? Y aquel pescozón que me dio en noveno grado, delante de Roxana. ¿Dónde anota usted eso agente?