Has Tocado mi Corazón
Has tocado mi corazón; sensible como siempre,
te apiadas de lo que estoy sufriendo.
En momentos de agonía, casi en un lecho de muerte
expresas palabras de aliento por lo que sigo viviendo.
Lo único que pido, es la oportunidad de mostrar mi valía,
porque la gente ignora que Dios no creo iguales;
por lo que ninguno es mayor ni menor, tenemos la misma simetría
con inteligencia y sentimientos, somos racionales.
El color de piel, la educación y la cultura
son factores altamente divisibles en un mundo de ambición
en el que reina la codicia propiciando la fractura,
llevando a un mundo enfermo en agónica aniquilación.
Tú, humano ¿Por qué te crees superior a los demás?
Sabes bien que lo armado para defenderte
eso también, tarde o temprano sin más, te destruirá.
Mejor busca la paz, excelente escudo para defenderte.
Tú, humano ¿Quién te crees, destruyendo a tu antojo?
¿Tienes conciencia de lo que estás haciendo?
De lo que existía en abundancia estás dejando muy poco,
al punto de la extinción y, otros solo viven en el recuerdo.
Lamentarás cada especie agotada
por cada una que extermines, te extingues tú mismo
ellas pueden vivir sin ti, pero tú sin ellas no eres nada
tú que presumes de raciocinio, piensa en el destino.
Sientes que te ahogas en tu respirar
aun así, no dejas de contaminar.
El agua que, por ley general contribuye a la vida
solo ocasiona muertes y dolorosas peripecias.
Dices: es el clima, ciclos naturales de la ecología;
tal grado de ignorancia a destrucción nos ha condenado
perfectamente, es causa de tu egocéntrica psicología.
Entonces me pregunto, ¿dónde está tu inteligencia, humano?
Basta de colores, nacionalidades y cultura.
Somos responsables del caos, pongamos orden.
Escuchemos el quejido de nuestra madre tierra.
Impidamos hacer de ella nuestra propia sepultura.
Toquemos nuestros corazones para que reaccione.
Será muy triste quedar rígidos en la muerte,
o sentir el estremecedor frío del sueño profundo.
Toquemos nuestro corazón, protejamos al mundo.
Has tocado mi corazón, sensible como siempre
en el momento que más hace falta.
El ser humano situado al umbral de la muerte
como hipnotizado hacia allá se abalanza.
Por tu color, dinero y poder
crees equivocadamente ejercer tu justicia
razonando que así debe ser
de otra manera enfrentaría tu furia,
dejando de lado el derecho supremo de mi libertad
que no debe ser truncada, solo por mi piel quemada.
Por tal razón, no humilles ni maltrates a tu congénere,
su color e idioma no da razón de castas
resulta que identifica la geografía, lugar, donde habitare
y con enorme odio, destruyes y aplastas.
Imagínate
Vives hoy, pero mañana, no sabrás
si por tus ojos la luz de nuevo entrará.
Imagínate.
Esas ventanas cerradas por la noche,
es posible no vuelvan a abrirse jamás.
Solo imagínate por un instante,
que la vida no te brindara otra oportunidad
Solo imagínate.
Con seguridad, lo puedo declarar
el atardecer llega junto con la oscuridad,
oscuridad que cubre poco a poco al cielo con ternura
despliegue de hermosura sin igual
Solo imagínate.
Imagínate que el sol, no vuelva a aparecer
Obviamente, nadie lo desea ni a de querer
o que el mar, de pronto se secara,
y la lluvia por siempre cesara.
Solo Imagínate.
El oxígeno acaba abruptamente y no puedes respirar.
Nuestra sentencia de muerte estaría dictada.
Solo imagínate por un instante.
La Garantía
Es de noche y todo en calma está;
es el momento de conmigo mismo,
mirando al horizonte, a las estrellas,
cuando escucho cantar a los niños,
el propio aire que respiro,
en esto siempre me pongo a pensar.
Pienso que la garantía de vivir en la tierra
siempre es bella,
por lo que tenemos que cuidarla donde quiera.
La contaminación, el odio, las guerras,
ese fuerte estallido nuclear,
pronto, muy pronto,
la vida en la mar, la tierra y en el aire,
a causa de eso, un día acabara.
El día nuevo sale a relucir,
pero sigue tan lleno de agitación.
Todo será peor cuando vuelva a concluir
y así será, hasta la extinción.
¿No entendemos humanidad,
la tierra es nuestra única casa?
No tenemos ninguna más,
en todo el basto universo, jamás.
La contaminación, el odio y las guerras, nos la acaban.
La garantía de vivir en la tierra está a punto de expirar.
Adiós Luisa
Tú no me lo dijiste
jamás me lo declaraste
mi amor crecía y crecía
tú, jamás me desilusionaste.
No era tu intención herir mi corazón
razón por la que tu dolor callabas,
por dentro estabas muriendo
sin embargo, tu sonrisa siempre me regalabas.
Me siento tan culpable,
esto no me lo esperaba.
Tú felicidad sí, que la recuerdo
ahora tu silencio, no se compara.
Adiós preciosa
te seguiré amando.
Seguirás siendo mi niña,
porque en mi corazón seguirás viviendo.
Adiós hermosa
algún día estaré contigo.
Hubiera dado mi vida por la tuya
pero, tú así lo has querido.
Adiós cariño.
Adiós Luisa.
Oye que eres hermosa
Como la belleza del sol eres tú
cual rosa en primavera
Tan valiosa como fino cristal
como el refinado oro eres tú.
Oye, sí, que eres hermosa
eres muy grata a mis ojos.
Tus labios como hilo escarlata
tu voz como el más bello canto.
Suplico a lo divino que me abras tu corazón
poder embriagarte con mi amor.
Disfrutar del paraíso de piel
empalagarme de tus besos de miel.
Renuevas vida y fuerzas de mi corazón
tan solo con los deleites exquisitos de tu amor.
La calidez y ternura de tu alma
me hace perder totalmente la calma.
Oye, sí, que eres hermosa
No hay mayor deleite que tenerte como mi esposa.
La Fuerza de Tú Amor
Que tierna alegría hay en tu mirada
Alegría de mujer enamorada
No puedes más fingir tu amor
Tan bello amor que nace en tu corazón.
Así resplandeció la fuerza de tu amor,
apareció como si fuera una canción,
tan fuerte como el mar, tan bello como el sol,
que en tu ansiedad amas con fervor.
Las estrellas brillarán su luz con esplendor
y el cielo mismo, llorará de emoción.
Estás tierna mujer muy ilusionada.
Por tu hermosura, la noche oscura, está iluminada.
Las flores del jardín lucen hermosas,
te acompañan a ti, mujer primorosa.
Decepción
Si este mundo no existiera
sí, en el que estoy sufriendo yo.
Hace tiempo que, en mí no hay primavera
Noches de invierno son las que lloro.
En el cielo; la luna y las estrellas
reflejan luz con buena intención,
sin embargo, mi vida está oscura
por un amor que me dejo sin compasión.
Por eso pido que este mundo ya no exista,
prefiero morir a seguir sufriendo,
sí, deseo enterrar esta decepción maldita
porque, igual manera estoy muriendo.
Nadie puede creer que esta decepción que tengo
es debido al gran amor que le abrigué,
sin esperar la puñalada por la espalda por su abandono
que, por más esfuerzo por olvidar, no lo logré.
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