un muerto en el andén de mi casa

En mi cumpleaños numero 6, salía corriendo de mañana hasta la casa de mis abuelos, era bastante grande y vivían allí mis primos, solían regañarme mucho cuando lo hacia, pues debía ser acompañado aunque fuera apenas una cuadra de distancia, me fui de igual, sabia que no me podían regañarme en mi cumpleaños, pensando en esto ahora es de mis primeros recuerdo y cuando tome conciencia del yo, llegue rápido creo, estaban mis primos y solo debía esperar a que mis padres llegaran con las preparaciones de la fiesta, amaba subirme en una torre de sillas y quedar por encima de los demás niños como un rey, en esos tiempos no entendía casi nada de lo que me rodeaba ni tenia la sensación de peligro que cualquier hombre pensante entendería al entrar en aquel barrio, pensaba que… no, no pensaba nada de verdad, a eso de las 1 P.M. llegaron mis padres con el decorado del evento, mi papá como siempre iba a regañarme, pero antes de eso mi madre me consintió como cada que llegaba.

Miren aquí – les decía a mis primos – pondré mi trono con cinco asientos, como me caen bien les permitiré ser mi guardia y tener dos asientos cada uno.

En lo que presumía y aumentaba mi ego escuche mucho ruido de fuera, estaban probando el sonido que hacían los fuegos artificiales, eso me decían, que los probaban para en diciembre usarlos, que eran muy diligentes y que incluso había una fabrica, pero que no me acercara porque se molestarían y no habrían fuegos artificiales para mi, quería alejarme pero caí de mis sillas, el portón era grande todo se podía ver hacia la calle, cerré los ojos, mis primos ya se debían de haber ido pues me gritaron que entraran. escuche un golpe en seco en agua espesa, pensé que seria uno de mis primos así que me levante a ayudarlo, no era el, vi a un vecino al cual no debía acercarme en el piso y otro apuntándolo tres fuegos artificiales carmesí y no supe más.

El 31 de diciembre, habiendo pasado tres meses del hecho y viendo el cielo lleno de fuegos artificiales. 

lo sabia, me mintieron – dije.