Luz Del Corazón

1. Libérame, Por Favor…

El calor fue mi mayor enemigo.
El frío, mi mejor acobijo.

Tal vez porque el suave brillo del sol me hace sentir el calor de una persona, lo cual no tengo.

Y el frío se asemeja a lo que siento todos los días, el infinito vacío de la soledad.

El miedo a estar sola.

El miedo a sentirme sola…

No busco un final feliz, busco uno en el que me sienta feliz.

Uno en el que no sienta un vacío, uno en el que tenga un amigo.

Uno en el que me sienta segura aunque el miedo a soñar me carcoma de una.

Bella soledad que puedo vivir… Que va.

Eso es mentira .

Que cruel de mí.

Solo deseo una persona que rompa ese muro.
Aquel que yo construí para que nadie me vea sufrir.

Que rompa ese muro y me devuelva a la vida.

Pues que más…

Estar encerrada ha sido mi ruína.

Que me libere del encierro en el que yo misma me puse.

Mi celda…mi cuarto, mis cadenas…mi llanto y mi tortura…mi música.

¿ Afuera al alguien para mí?

Si es así, ven.

Libérame.

Que yo feliz ,iré junto a ti.

Que rompa ese muro y me devuelva a la vida.

Pues que más…

Estar encerrada ha sido mi ruina.

Juntos caminaremos, cantaremos y danzaremos.

Volviendo al juego, volviendo a la vida.

Pero ya no sola.

En compañía.

Mientras tanto sigo esperando

Ya vienes por mí?

Si es así, escucha mi ruego.

No grito, ni suplico.

Solo espero en silencio .

Con la música en mi teléfono .

Con llantos por dentro.

Con sonrisas fingidas.

Ocultando el dolor de mi vida.

_ E.

2. Cobarde Amor Mío…

Cobarde he de llamarte a tí.

Amor mío.

No más cariño ni sonrisas.

Es como si yo fuera historia antigua.

Miradas furtivas, sonrisas reprimidas, palabras al oído.

¡Todo se ha ido!

Te olvidaste de mí.
Qué cruel de tí.

Magnánimo y cándido ante la gente.

Aquella a la que te gusta engañar.

Fingiendo inocencia y pureza.

Más yo fuí la más desafortunada, porque caí ante tí.

Caí en tu hechizo, en tu juego maldito.

Ese al que te gusta jugar y luego lavarte las manos como si no hubiera pasado.

Cobarde eres tú.
Incrédula yo.

Ojos que derramaban ternura, ahora solo desprecio y amargura.

¿Qué nos pasó?

¿Porque tú amor cambió?

Nunca entenderé a lo que te gusta jugar.

Y aunque tanto daño me has hecho con tu desprecio.

Solo deseo que me vuelvas a amar.

Me odio por eso.

Porque aún te espero.

Porque aún te veo.

Porque aún te sueño.

Porque aún te siento.

Amor debes saber que el bien te deseo .
Aunque desearía no haberte vuelto el amor que ahora no me será devuelto.

Punto final le has puesto.

Aunque yo creía que era el sempiterno .

Me odio por eso.

Porque te sigo esperando.

Porque te sigo viendo.

Porque te sigo soñando.

Porque te sigo amando.

¿Cruel será mi destino si decido seguir?

Seguir amando sin ser amada.

Seguir viéndote reír aunque esa sonrisa no sea para mí.

Dime ahora.

¿Que piensas de mí?

Piensas que soy desdichada por seguir atrás de tí.

Pues dime, que solución me das a este amor vivaz.

Me odio por eso.
Te odio por eso.

Porque yo sé que tú crees que no sé.

Que me sigues mirando.

Que me sigues soñando.

Que me sigues queriendo.

Que me sigues sintiendo.

Y solo por eso sigo esperando, a que me vuelvas a ver y de nuevo a querer.

Dime…¿Está mal seguir esperándote?

Son tus sentimientos o solo sige siendo parte de tu juego.

Pero mientras te dignas a responder.

Yo te seguiré mirando.

Yo te seguiré esperando.

Yo te seguiré soñando.

Yo te seguiré amando.

_E.

3. Siempre en Silencio…

Siempre en silencio,
Siempre te cuento…

Mi vida, mis sueños, mis miedos.

Siempre en silencio,
Siempre espero…

Un saludo, una sonrisa que sea tuya, mi vida .

Siempre en silencio,
Siempre te veo…

Hablando y riendo, anhelando ser la causa de aquello.

Siempre en silencio,
Siempre te hablo…

Algún día escucharás mis historias que guardo?

Siempre en silencio,
Siempre deseo…

Una vida en la que tú y yo seamos uno.

Miedo a acercarme a lo que más anhelo.

Tú eres un sueño.
Tú eres mi sueño.

Y como todo sueño al despertar ya no te veo.

Ya no te veo a mi lado abrazándome diciendo:

«Te amo»

Vuelvo a la realidad, en dónde tú sonrisa ya no es mía.

Dónde mi existencia ya no es de tu incumbencia.

Y solo deseo dormir para una vez más decirte lo mucho que te amo y hacerte sonreír.

Siempre en silencio,
Me harto por eso…

Por no ser valiente y seguir temiendo.

Temiendo tu mirada fría sobre mí al saber que tus sentimientos no son para mí.

Que tú amor se irá con alguien más…

Y yo solo lo deba aceptar.

Siempre en silencio,
Te sigo queriendo…

Y si algún día me hablarás tú primero….

Que va.

Eso no pasará.

_E.

Una parte más…

Recordé aquella vez que viniste a visitarme, sabes fue un día con bastante sol y todo indicaba que ese día iba a ser uno muy memorable y así fue…

Fuimos a la playa juntos mientras comíamos un helado que se derretía porque no podíamos parar de hablar y luego dimos un paseo en barco que tú me quería invitar pero al darte cuenta que el dinero no iba a alcanzarte tuvimos que pagar cada uno.

Luego de eso fuimos al centro de la ciudad y nos pusimos a andar por todas las tiendas aunque no teníamos ningún centavo en el bolsillo por el paseo en barco, pero aún así nos divertimos actuando como si fuéramos a comprar algo, las demás personas nos quedaban mirando con incomodidad mientras que las asistentes de la tienda nos pedían que nos retiremos.

Pero nada de eso importaba, no teníamos verguenza porque estábamos los dos juntos y eso era más importante que unas cuantas miradas juzgonas de la gente, eso no importaba.

Solo importabas tú, para mí.

Solo importaba yo, para ti.

Luego de eso nos fuimos a comer unas empanaditas de una señora, a mí no me gustaban pero para ti eran las mejores que habías probado, y no sé que fue pero con solo verte disfrutarlo, me hizo pensar que también eran las mejores que yo había probado. A la señora le parecimos tan adorables que decidió perdonarnos el hecho de que no teníamos dinero y nos habíamos olvidado.

Sin duda fue un día muy hermoso y todo porque tú estabas ahí, solo eso lo hizo el día más feliz de mi vida, porque eras tú el protagonista de ese día, todo giraba alrededor tuyo incluso yo, solo podía verte a ti.

Y ese no fue el único día, desde que me hiciste la pregunta y yo la respondí con un sí, todos los días fueron igual de hermosos y alegres, porque me causabas ese sentimiento que nadie más podía, amor.

Sí, ese sentimiento era el que bombeaba mi corazón cada día contigo, desde el despertar hasta las buenas noches que nos decíamos mientras besabas mi frente, era tan hermoso.

Fue tan hermoso.

Tal vez sea exagerado para muchos pero, ese sentimiento ya no lo volveré a tener con nadie, porque tú fuiste dueño de él.

Asi que no tiemblo al decir que fuiste el gran amor de mi vida ni tampoco pienso volver a llorar al pensar en el porqué me abandonaste.

Fue de imprevisto, no yo lo vi venir, ni tú tampoco, pero el destino cruel celoso tal vez de nuestra felicidad decidió que no deberíamos estar juntos y así logro separarnos.

Pero yo te amaba como no amaré a nadie y no necesito preguntarte, porque sé que tú también me amaste con todo el alma y no tengo porqué dudar de eso.

Nuestro adiós fue tan fugaz nuestro amor sigue prevaleciendo a pesar que solo queda uno para recordarlo.

Porque conmigo basta.

Solo necesito recordar nuestro amor para que vuelvas a vivir, para volver a sentir tus caricias, tus palabras, tu aliento en mi oído que me causaba un cosquilleo y el cual siempre me hacía reí.

No te preocupes, cariño.

No volveré a llorar, porque soy feliz en haber sido la afortunada merecedora de tu amor.

Tu recuerdo no me hace llorar, me hace sentir que fui la más afortunada en poder conocerte y sobre todo amarte.

Donde sea que estés, no me olvides y siempre recuerda que en este lugar siempre hay alguien que te ama y seguirá amando.

Con todo el amor que puedo seguir ofreciendo, viviré mis últimos días recordando nuestro amor y nuestro nosotros.

Te amo…