En transito

Me confiesa que es su primera vez con la aplicación y le tranquiliza que mi situación sea la inversa. No solía hacer grandes distancias antes, entonces nunca supo de estas nuevas posibilidades. Había decidido irse de la ciudad, la mudanza y las visitas la obligaban a viajes de ruta con tediosa frecuencia.

Le comento que prefiero viajar asi, el paisaje se disfruta mas a través del parabrisas.

Con fascinación y cierta incomprensión pregunta sobre mi viaje, reconoce que jamás se animaría hacer algo así, bastante estrés le produjo irse a la montaña como para imaginarse sin un lugar de pertenencia fijo, no quiere una rutina desmontable y menos un círculo social volátil. El contacto con la naturaleza y la inmediata posibilidad de escalar le retribuye toda distancia de sus mas cercanos vínculos, pero no recuerda una decisión tan dramática en su vida.

Le subrayo que lo suyo es de mayor coraje, ser nómada cuando sin haber hecho raíz es mas natural y sencillo que desarmar para volver a empezar, menos intimidante que enfrentarse a cada decisión propia que te trajo al presente. Requiere mas valor que andar sin plan esperando que la juventud provea. Lo mío es puro ocio, lo de ella es un proyecto de vida.

Sin refutar me aclara, ella comenzó de nuevo a los 44, yo podría comenzar y reintentarlo 2 veces mas. Posiblemente mi ocio sea un aprendizaje, una etapa necesaria para un mejor comienzo.

Aun así, siempre dudo si es un viaje o una huida, si estoy buscando o solo espero tropezarme con la respuesta. Si lo aprendido ayudará o solo serán grandes recuerdos que luego alimenten la dolorosa nostalgia.

Yo me tarde años en dar el cambio y tengo miedo de apurarme en recuperar el tiempo perdido, me dice. El mundo va a una velocidad inimitable y suelo caer en los dos errores mas comunes, paralizarme o subirme al vértigo. Ojalá este maridando bien la esperanza con la voluntad, así no tenga que volver a desarmar.

La diferencia entre capricho y convicción es saber el motivo de la acción, no habrá remordimiento si uno actuó en consecuencia.

La pregunta será cuánto tiempo mas uno puede aprender o que tan tarde puede llegar un comienzo.

Espero que el destino permita la impuntualidad, intente el chiste.

Los puntuales hemos sido nosotros, ya llegamos.