El espíritu son los individuos.
La espiritualidad nace de cada persona, pero el espiritu nace de cada individuo. Porque el espiritu es la aceptacion de todos los seres, como uno solo, como un individuo. Es por eso que para comprender el espiritu, es necesario comprender el individuo.
Las personas podemos verlas, y no me refiero a su cuerpo. Imaginate una persona, ahora quitale el cuerpo. Sigues viendola. Porque la persona es una representación, no un representado. La persona representa al cuerpo, mas el cuerpo no representa a la persona. Es por eso que una persona es una representación de una esencia. La esencia que cada uno de nosotros representa, es única.
El individuo, es un concepto. Algo invisible, e indescifrable con los sentidos. La única forma de comprender a un individuo, es observandolo. Porque para comprender al individuo debes ver lo que rodea al individuo, mas no puedes ver al propio individuo. Un individuo es una interpretación. Tú interpretación.
Las personas no tenemos espíritu. Por eso cuando hablamos de personas, siempre sale el tema de quien es malo y quien es bueno. Porque la apreaciación sensorial, se basa en lo bueno y lo malo. Pero cuando hablamos de individuos, todos somos iguales. Porque cuando pensamos, todos lo hacemos igual. La sociedad está compuesta de personas, mientras que la gente, de individuos.
La clave para entenderlo es apreciar lo diferente que es el pensamiento y el sentimiento. Cuando pensamos, olvidamos nuestras preferencias, olvidamos como nos sentimos. Y cuando sentimos, olvidamos el pensamiento ¿Cómo lo sé? Porque cuando escribí del pensamiento pensaba, y cuando escribia del sentimiento sentía. Para saber comunicar, no es necesario controlar la palabra, solo es necesario controlar el vocabulario. Y por supuesto entender las diferentes maneras en las que puedes hacerlo.
Yo cuando hago algo puedo sentirme siempre el mismo. Porque cuando me siento, me siento siempre el mismo. Pero cuando interactúo con otros, cambio lo que pienso de mi.
Comprender el espiritu, es comprender nuestras necesidades y preferencias. Entender que todos queremos algo diferente, pero que todos queremos al fin y al cabo ¿Qué es más fácil? Entender lo que queremos todos, o entender el querer.
Por eso el espíritu, no es sentir o saber. Es saber sentir, y sentir saber. No hay que destruirse la mente para saber, así como tampoco hace falta sacrificarnos para sentir. Hay que hacerlo todo en su medida.
Todo es dual, todo es uno y otro. Esto y aquello. Lo bueno y lo malo. Por eso como ya he mencionado antes, la clave es entender que el significado de lo bueno y de lo malo, es el propio significado. Todo para ti es bueno cuando eres capaz de creer que es bueno, y todo es malo cuando perdemos la capacidad para apreciarlo todo. Porque las cosas son malas, cuando no existimos.
Por eso hago tanto incapié en que la existencia es un producto intelectual, y no algo material. Porque existir es un acto conciente, no algo natural. Todo lo que sabemos, fue causado por nuestra consciencia
Y es gracias a la consciencia, que tenemos noción de uno, de los demás, y de todo.
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