Entre los cuerpos y los calendarios

Entre los cuerpos y los calendarios
entre las botellas y los ceniceros
habita una sed fabricada con celeste e infinito.
Entre las horas que llegan vacías
entre las nítidas carcajadas del camarero
habita una sed fabricada con sangre de poetas.
«Corrupción en Barbate!» Grita un atún encebollado.
Y entre las capas de cebolla
habita una sed fabricada con catedrales y lunas lejanas.
Mirar al firmamento
y sentir que la realidad es un sueño inverosímil
un sueño poblado de partículas huecas y materia oscura.
Como un sueño que se sueña a si mismo
y en él flotan los siglos humanos
siglos como barcos cargados de sonámbulos.
Y entre los segundos que dan forma a los milenios
habita una sed fabricada con espíritus silenciosos y las mejillas de Alejandra Pizarnik.
Una sed insistente
una sed que no puede ser saciada
a menos que te nutras de ella.