# LA CALLE DE TIERRA Y BARRO,..

Me despierto. Después de una noche de sueños. Y el sueño me llevó a recorrer una calle de tierra pero que tenía el cordón de cemento que hace que algunos vecinos estacionen su vehículo frente a sus casas. Pero los días de lluvia, el barro que se forma por el agua, hace que esos vecinos estacionen sus autos a cinco cuadras, donde el asfalto los recibirá sin excusa alguna y el único protagonista que transitará el barro de la calle sin asfalto es el carro ambulante de Don Jeremías. Su caballo tiene claro cómo transitar en aquella superficie inestable mientras su conductor con su parlante de voz repite: “Hola vecina, compro todo lo que le sobre”. Unos vecinos sacaban una cuna ya que quien la ocupaba tiene hoy 12 años… otra vecina ofrecía dos sillas que están para el arreglo. Y se sumó Doña Magdalena que curiosamente sacó con la ayuda de su nieto, un lavarropa que hace un tiempo dejó de lavar.

Cansados ya los vecinos de ver la calle de tierra (hoy con barro) decidieron ir al municipio para reclamar que se asfalten las cinco cuadras que no tienen asfalto pero sí cordón. El representante de los manifestantes le prometió al Intendente que le darán el voto, ya que en dos semanas hay elecciones. Y el intendente, con la ambición de ser reelecto, mandó a asfaltar las calles de tierra y por supuesto fue a la inauguración: cortó la cinta y esas cinco cuadras fueron bautizadas con el nombre de «la calle de la manifestación».

Al pasar los años, la calle de la manifestación comenzó a tomar vida: semáforos, cámaras de seguridad, negocios, y lo logrado tomó forma desde aquel «día de la manifestación» que hizo historia para que la mitad de los habitantes disfrutaran de la calle asfaltada. La otra mitad descansa en el cementerio local y vaya sorpresa recién ahora la calle que va al cementerio se asfaltó. Es una pena que el resultado final de asfaltar haya llegado muy tarde.

Hoy el progreso es una realidad: don José puso una verdulería, don Pedro abrió un taller mecánico. Yuni y su marido Yan zum siguieron la costumbre y pusieron un mini mercado. Elvira abrió en su living una peluquería que hace que las mujeres de pueblo concurran y se pongan mas bellas aún. Liliana puso con su hija farmacéutica una Farmacia. La Sociedad Italiana, que tuvo poca actividad con los jubilados que concurrían para entretenerse, refaccionó su salón preparándolo para cumpleaños, casamientos, y bailes familiares. Y la familia Quirós, con sus cuatro hijos, se encargó de pintar los cordones de blanco como también la senda peatonal.

Todos los 14 de Febrero se corta la calle para festejar con pasacalles, luces de colores, globos verdes color de la esperanza, porque los habitantes nunca la perdieron. Las calles asfaltadas invitan a autos, motos, bicicletas, y la buena noticia es que la semana próxima recorrerá las calles , el colectivo de la línea 120, ya que sus habitantes eligieron ese número en homenaje a los 120 fallecidos en el día en que el pueblo se manifestó. La ambición, el éxito, la realidad, la valentía y el liderazgo fueron cualidades que tuvieron los arriba nombrados. Además de enfrentar al poder de turno, los pobladores le dieron paso al éxito y a la valentía. Llegó el día de las elecciones: la gente se acercó a votar y a la noche el resultado fue los votos de las 5 calles asfaltadas que contienen 240 habitantes. Pero la sorpresa fue como quedaron sin asfaltar 9 cuadras que contienen 960 personas que votaron en contra del actual intendente, éste perdió la elección. Así que, si quiere recuperar el lugar perdido, deberá asfaltar las calles de tierra. Un pueblo que no tiene calles asfaltadas, ni cloacas ni iluminación y seguridad, es porque sus habitantes no supieron hacerse valer, y por ello, pierden su dignidad. Así son las cosas: sin esfuerzo y dedicación no se logra nada.

Los que fueron chicos hace aproximadamente unos 20 años, recién ahora ven que su barrio tiene vida propia. Esos que hoy son adultos, vieron y jugaron en el barro así como los chicos que van de vacaciones a algún lugar de la costa atlántica juegan y hacen castillos en la arena. Caminando por el barrio sus veredas también tuvieron un cambio: algunas de baldosas, otras veredas de cemento, y como hace mucho tiempo no pasaba, cada vecino en el frente de su casa una silla o un banco donde todas las tardes salen a compartir unos mates. ¡Lo que significa un barrio con sus calles asfaltadas! No sólo dignifica, sino también la llegada de parientes que podrán estacionar sus autos en el frente de la casa a visitar ya que antes del asfalto lo debían estacionar a casi 6 cuadras por el barro que se los impedía.

Nostalgia, recuerdos, y nos detuvimos a hablar con «la Abuela Victoria», quien nos cuenta que el amor de su vida partió sin ver cómo el barrio, la calle de tierra, hoy es solo una anécdota.

Hay una canción que inmortalizó Mercedes Sosa donde hacía referencia a que “todo cambia” y pareciera que la letra se escribió para el Barrio De La Manifestación porque es verdad que en el barrio todo cambió: para los niños,esos que juegan a la pelota en la calle y la cortan por media hora con los arcos que hizo de madera Don Carmelo el carpintero del barrio y se imaginan que uno es Maradona, otro es Pelé. El remisero Don Juan, que hace de árbitro y director técnico a la vez, da por finalizado el partidito, porque comienzan a regresar vecinos y vecinas de sus trabajos y necesitan tener el lugar libre frente a su casa para estacionar y él vuelve a salir con su esposa para ir al mercado que tiene abierto hasta las 22 hs. Cae la noche estrellada,. y al amanecer, la calle no dejará que el barro vuelva a la Calle De La Manifestación.