AMORES
Lo mejor de un amor platónico
es que no tienes que jugarte la vida por él
Es dulce, suave, ligero y acomodado
Puedes construirlo despacio
a tu antojo
con recuerdos filtrados
y sueños fabulados
Nunca será, obviamente,
tan potente y desgarrador
como un amor físico
Es como una suave brisa
comparada con un terrible huracán,
Es como una larga sonrisa de conveniencia
y nunca tendrá la genial irreverencia
de una carcajada en un entierro
Es una opción indolora
e insípida
como bañarse en un mar transparente
con un burka
Una elección barata emocionalmente
para vivir tu vida desde el gallinero,
cómoda y segura,
incluso esperanzada
si puedes convencerte de que
el tiempo y la suerte
harán que un día,
si todos los astros se alinean,
puedas empezar a vivir tu puta vida
entre esos soñados brazos.
Y también te garantiza
cual será tu último pensamiento:
“¿Por qué cojones no me arriesgué?”
ESTRELLAS
Me apretaba la mano
para avisarme
y después me miraba fijamente
con la boca abierta
Escrutábamos el cielo negro
desde nuestras toallas extendidas
en el césped del jardín
en silencio oscuro,
como quien no quiere despertar
Yo la miraba de soslayo
adivinando que pedía su deseo
cada vez que una estrella
cruzaba fugaz;
siempre el mismo,
desde siempre
Cuando acertaba a mirar al cielo
la estrella ya se había fugado
y le decía burlón
que se lo había inventado
y ella me miraba con los ojos muy abiertos y me decía
“Que no, que te lo juro
¿En serio no la has visto?”
y una mueca de desilusión
la transformaba,
como cuando me gritaba
de pequeña
“Mírame papá, te lo vas a perder”
y yo seguía con mis cosas
arrepintiéndome al momento
al ver esa carita de desilusión…
y lo dejaba todo,
y ella me miraba fijamente
para confirmar que esta vez
sí estaba atento
y repetía la voltereta
girando al cielo
con su falda de vuelo
y chispeando
con sus zapatos brillantes
Y me decía orgullosa
“¿Lo has visto, verdad?”
y sus ojos reían
y los míos también
Y quiero pensar
que los deseos se deben cumplir
cuando son tan intensos
que tocan el corazón
porque sería una mierda
tanta ilusión desperdiciada…
Año tras año
acumulando Reyes,
velas sopladas,
estrellas fugaces y
tréboles de cuatro hojas
su deseo fue creciendo
Y al final se ha cumplido,
y ya está entre nosotros
porque ver otra vez
esos ojos chispeando
como estrellas fugaces
cientos de veces
se convirtió también
sencillamente
en nuestro mejor deseo
AMORES
Lo mejor de un amor platónico
es que no tienes que jugarte la vida por él
Es dulce, suave, ligero y acomodado
Puedes construirlo despacio
a tu antojo
con recuerdos filtrados
y sueños fabulados
Nunca será, obviamente,
tan potente y desgarrador
como un amor físico
Es como una suave brisa
comparada con un terrible huracán,
como una larga sonrisa de conveniencia
ante una carcajada en un entierro
Es una opción indolora
e insípida
como bañarse en un mar transparente
con un burka
o tomar el sol de invierno
bajo una opaca sombrilla
Es una opción barata
para vivir tu vida desde el gallinero,
cómoda y segura,
incluso esperanzada
si puedes convencerte de que
el tiempo y la suerte
harán que un día,
si todos los astros se alinean,
puedas empezar a vivir tu puta vida
entre esos soñados brazos.
Aunque en el fondo sabes que, probablemente,
eso nunca pasará
y minutos antes de morir
te reprocharás llorando que, sencillamente,
deberías haberte arriesgado.
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