Tu boca
Tu boca, esa boca que me besa,
ocultando la traición que cometiste
sin compasión,
destrozando sentimientos
que hoy ya no tienen aliento,
como no lo tiene tu cuerpo,
mientras, sin respiración,
ocultas tu deslealtad;
tus más impuros deseos,
que apagaste en su cama,
mientras yo, en desvelo,
quedaba sola con tu ausencia.
Con toda certeza,
disfrutabas su presencia
y el delirio oculto,
perdido en su laberinto
de sexualidad.
Te fuiste sin pensar
lo que dejabas atrás.
Caen como rayos
las mentiras de tus días,
cuando a oscuras
descubría que no estabas.
Esa boca, de mi vida,
hoy lastima como espada
este pecho,
que fue almohada
de tus más oscuros secretos.
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