Independientemente de la vida que llevemos, debemos ser conscientes sobre la importancia que genera la toma de decisiones en nuestro porvenir. Como seres humanos, el surgimiento de cuestiones y dudas al momento de tomar una decisión es normal. Desde un punto de vista general “por así decirlo”, tratamos de buscar un sentido para todo lo que hacemos.
Quizás por esta razón muchas personas temen decidirse a algo, sienten miedo que lo que podrían elegir no pueda ser lo correcto o adecuado para su vida. Las diversas dudas que llegamos a tener, influyen a tal magnitud de repercutir enormemente en lo que tenemos que elegir o decidir. Entonces, ¿debería ser necesario tomarnos el tiempo prudente para analizar debidamente nuestras decisiones? Si la respuesta fue SI, entraríamos en un ámbito paradójico donde llegaríamos al cuestionamiento del inicio. Pensaríamos demasiado sin llegar a una respuesta aparente y lo único que conseguimos son los diversos temores y miedos que nos atormentarán a lo largo de nuestro camino. En cambio, si la respuesta fue NO, tomaríamos decisiones al azar. ¿Y sería posible vivir con ese sistema?
Quizás cuando pensamos sobre decisiones al azar, lo primero que se nos venga a la mente son un par de dados, simplemente los lanzas esperando que la suerte, el destino, la vida o Dios escojan lo mejor para ti. Pero ambos sabemos que quién está arrojando los dados eres tú, solo que a veces tratamos de eximirnos de nuestras responsabilidades por temor a los resultados.
Para concluir, en ambos casos, sin importar el tiempo que se tome para pensar sobre la importancia de nuestra decisión, cabe recalcar que cada uno es responsable de las decisiones que tome, sean estas al azar o pensadas detenidamente. Pensar es idóneo, y no debería quedar inconcluso frente a una decisión. Deberíamos de tener en cuenta que así como pensamos, tenemos que actuar y hacernos responsables de estas decisiones. Independientemente de quien seas y la vida que lleves, tú te conoces mejor que nadie, analiza tus pensamientos y al final arroja los dados, no te los guardes en la mano, sea cual sea el resultado, ten en cuenta que habrá muchos turnos en los que volverás a arrojar esos dados
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