Si esa montaña parece demasiado alta,

El monstruo invencible

Y los pensamientos más terribles ya sentenciaron la peor de las respuestas

Tranquila, toma aire y seguí caminando.

Nunca lo olvides,

La constancia vale más que la velocidad

Todo tiene un fin

Y los sueños siempre ganan

Cuando la vida se ponga difícil

No te rindas, simplemente porque no sabemos rendirnos.

Que el más profundo de tus miedos

Destruya todo lo que sabes sobre vos,

Queme tus biografías y te reinvente tantas veces

Como tus metas lo necesiten

Siempre elijas, porque si no somos eso que elegimos,

Solo seremos aquello que no elegimos ser

Y eso, querida mía, es algo imperdonable

Ya que no elegir es matar a la libertad

Y yo, que todavía estoy aprendiendo a caminar junto a ella,

También moriría.

Que las cosas realmente importantes nunca cambian,

Siempre se puede volver a empezar

Y cuando todo parezca perdido

Te dejes guiar por el corazón.

Que si, sos mas fuerte de lo que imaginas

Y ni siquiera la terquedad y frialdad de la vida

Podrán frenarte.

Y por sobre todo,

Jamás olvides a aquellos que siempre estuvieron ahí,

Quienes te dieron el corazón en forma de palabras,

Y te sacaron de ese lugar donde los sueños no son posibles

Todo llega para quienes tienen el valor suficiente de defender sus sueños

Respira hondo y seguí caminando,

Hasta que a la vida no le quede más opción que darte lo que mereces

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