Sola, mirando el espejo retrovisor de mi destino. Palpando, una vez más, ese algo misterioso que cada tanto sacude lo profundo de mí ser. Ese avanzar a tientas, ese tropezar constante. Ese andar perenne sobre las líneas del camino.

Mírame. Entrelazando entre mis dedos la cadena de versos que nadie leyó.

*

Aguas cristalinas de océanos profundos

Danza del pasado

Noche de noches

*

Dónde se agita el último palpitar

Dónde las horas

Dónde el fuego del mar

*

Imagen: Créditos a su creador.

Luz Marina Méndez Carrillo/07/01/2023/ Derechos de autor reservados.

Obra registrada en Cedro-España/ https://www.cedro.org/

URL de esta publicación:

OPINIONES Y COMENTARIOS