Una simple coincidencia

Camino hacía al sol, donde mis labios, mis manos, mis ojos pueden sentir la cegante luz, Está recién amaneciendo y yo rumbo a mi hogar. Mi corazón me advierte que vendrá algo a continuación, yo no hago caso y sigo caminado hacía sol, hacía mi hogar. Al doblar la calle a metros de mí te localice y al mismo tiempo tú a mí. Se que nuestros corazones se tocaron y por eso mismo no podía dar marcha atrás, debía seguir caminando a pesar de que estabas tú. No pasaba ningún auto, ninguna persona y menos un perro que es lo más común encontrarse… sólo eras tu y yo en ese pavimento, yo caminando hacía ti y tu quieto allí, no porque lo hayamos decidido, ¿la vida nos quería juntar? Cada vez más cerca mi aliento se cortaba, colocaba la música más alto, y mis sentimientos se derrumban por cada paso inseguro que daba. Tú mirada cruzó, mi sonrisa se desvaneció, nuestros ojos no se vieron no se buscaron, y ahí supe,
que todo acabo.