Una infancia dificil

Una niña llamada sally de unos 8 años vivía en una tristeza constante en su día a día.

Esa niña mas alta que las demás niñas de su edad, de piel morena y pelo largo apenas tenia ganas de ir al colegio, de ir a clases trascolares y de salir a las tardes con los amigos.

Esa niña tan triste soy yo, así que os voy a contar mi infancia tan dura que he tenido.

Yo vivía en un pueblo pequeñito llamado Bujaraloz, donde me crie junto a mi hermano un año mayor que yo.

Cuando tenía seis años padecía de una enfermedad de la que me tuvieron que operar de urgencia de un coagulo de sangre en la parte trasera de la cabeza. Todo salió bien.

Yo iba a un colegio donde los niños y niñas me hacían un gran vacío por ser hija de una mujer extranjera, en cambio a mi hermano no le hacían ni le decían nada.

En clase nadie se quería sentar al lado mío porque decían que desprendía mal olor, que tenia la ropa sucia, el pelo sucio, las uñas sucias, etc.

Salíamos todos a la hora del recreo donde yo me sentaba sola en un banco comiendo el bocadillo que me había preparado en casa. La hora que teníamos para jugar y pasarlo bien, yo me la pasaba mirando a los demás y preguntándome por qué nadie quería jugar conmigo ni relacionarse conmigo. Yo no había echo nada a nadie así que me contenía las lágrimas y volvía a clase con todos los demás niños.

Al acabar de clase, siempre me iba para casa con mi hermano hacer los deberes que nos mandaban y a merendar. luego mi hermano se iba con sus amigos a jugar como cualquier niño normal. Yo en cambio me quedaba en casa haciendo las tareas de casa, en mi cuarto o jugando a los videojuegos.

Me sentía tan triste y sola que no tenia ganas de hacer nada.

Mañana continuare contándoos mi infancia.