CONOCIENDO A LOS PROTAGONISTAS

El sol se ha puesto ya, hora de levantarse, de seguir con esta rutina, la que tengo que hacer para ser parte de esta sociedad, todavía tengo imágenes de aquella noche con Sherlyn. – Pensaba Aldahir.

Quien no quisiera poseer una morena de fuego como Sherlyn, mulata de fuego que derrite al mas frio corazón, con su mirada te transporta al viaje mas sensual y majestuoso que puedas imaginar, su cuerpo parece esculpido por los mismos dioses, su cintura enloquece al mas insipido y su andar hipnotiza a cada paso que da, su alegría y juventud son su mejor tarjeta de presentación.

Dichosos aquellos que tienen el privilegio de saber que se siente tocar una piel de mujer, es tan cálido y suave como el terciopelo.

Oh esperen, nunca he tocado terciopelo, otro cliché más, acaso soy invento de las masas, -se decía Aldahir una y otra vez, cada vez que mencionaba una frase trillada-

¡Otra vez divagando en mi mundo imaginario! pero no quitemos el dedo del renglón…… la piel femenina, ese olor tan dulce, suave al tacto, es como subir por una ladera llena de rosas y bajarla rodando, para hacer salir el dulce olor que se impregna en mi ser al ser aplastadas por mi cuerpo, sentir que nada en la vida tiene más sentido que ese fino toque que tiene la piel, esto es una ODA a la perfección así es Sherlyn.

Y sin embargo no es ella la que quiere mi corazón.

Aldahir no se percato de la hora por estar divagando.

En momentos como estos quisiera que mi realidad fuera otra, pensaba Aldahir al correr al trabajo, -un día más, uno a la vez- se decía a cada momento, corriendo por la vida para cumplir con el reglamento.

El reloj checador hace el sonido de entrada, -lo he conseguido una vez más, estoy cumpliendo con las normas de la sociedad, estas normas que me ayudan conseguir el alimento, vivienda, ropa y otras necesidades que es mejor no mencionar, banales dirían los demás, cosas triviales que no necesitamos pero que nos hacen estar mejor.

Al mirar que llega Aldahir, Miranda se pone feliz y lo saluda, el la mira y le regresa el saludo sin tanta efusividad.

Ella no comprende esta reacción física que le recorre todo el cuerpo tan solo con verle no sabe porque pero le estremece, le hace muy feliz, aun cuando el ya no se fije en ella, sus grandes ojos y pelo rizado la hacen ser una belleza única, hermosa tez, piel blanca y delicada suave al tacto, digna de una adolescente a pesar de contar con 25 años, la complementan unos pechos firmes, cintura deseable al tacto, trasero en su lugar, piernas que cualquier atleta envidiaría.

Pero él, él es un trofeo, una meta inalcanzable, un deseo fugaz, que solo puede admirar y saborear cuando está en su jornada de trabajo, cara definida, mentón partido que te invita a admirar su boca y tratar de robar el beso más prohibido que te puedas imaginar, atlético, alto, brazos con los que te podría cargar por horas sin cansarse, sensual hasta su poro más escondido y huele tan bien.

Eres mi sueño Aldahir.

Miranda es licenciada en mercadotecnia primera en su clase, incontables reconocimientos y menciones se ha ganado a lo largo de su carrera estudiantil, miembro de una familia de renombre que decidió probar fortuna en la gran manzana aun a pesar de que no había la necesidad de hacerlo, triunfar y demostrar su valía eran su motivación en esta vida, pero siempre hay obstáculos y cuando uno de ellos se instala en el corazón, la razón pierde poder y se vuelve un espectador mas.

El solo mencionar su nombre hace que su forma física quiera ir por él, abalanzarse, hacerlo suyo por una única vez, no pide más, solo una vez y con eso sería feliz el resto de su vida, sentir sus labios, su cara, su cuerpo pegado al suyo, el roce de sus manos, mirarlo a los ojos y saber que solo piensa en ese momento en ella, que el mundo no existe, llevarlo lejos, muy lejos, donde ningún lerdo interrumpa este mágico momento, solo una vez, una maldita vez……

Hola Aldahir, buen día como estas -Le pregunta Elina.

Yo bien -contesta Aldahir.

-Algo agobiado por mi falta de hábitos que provoca que todos los días llegué corriendo- al momento que le regala una pícara sonrisa.

¡Que se cree esa sueca, al venir de tan lejos a robarse los novios de este país! ¿que en su país no hay hombres guapos? ¡Pero me va a oír esa perra! murmuraba Miranda desde su cubículo al observar la escena.

Cristal al ver a su amiga tan alterada se apresura a preguntarle.

¡Miranda! ¿acaso sigues con tus viajes mentales otra vez? Soñando con la persona más fría, engreída, superficial y menos sensible del género masculino que se pueda encontrar en esta ciudad de mierda, cuando vas a poner los pies en la tierra, tú eres de esas estrellas que cayeron en la tierra con un propósito y que están a la espera de un dios que las vuelva a subir para no bajar jamás, (Lo del príncipe azul ya está trillado y estos se volvieron más engreídos y delicados que una mujer), Aldahir no es lo que piensas, déjalo ir, no sucumbas ante tus deseos más bajos que solo lograrían llenar de lágrimas esos hermosos ojos que tienes.

Le comenta Cristal al momento de levantarle los lentes y arrancarle una sonrisa de par en par.

El que te hayas acostado con media empresa no significa que sabes cómo son todos los hombres -Le contesta Miranda.

jajaja… ríen las dos.

Aldahir es un joven recién egresado de la carrera de Mercadotecnia, que trabaja en el marketing Strategy Center, joven visionario con mucho futuro lo describiría su jefe pero que a veces se pierde en sus pensamientos a sus 26 años tiene el mundo a los pies, de nacionalidad Brasileña, es un torbellino latino que causa una gran impresión al verle, pero tiene un vacío muy profundo, su alma no estaba satisfecha no entendía porque la gente al amar, era feliz o desdichada, constantemente atormentaba su mente con estos pensamientos.

Él vive en un departamento en el centro de la ciudad de Nueva York, la famosa gran Manzana, incontables son las veces que ha llevado a una chica a su departamento, pero sin lograr sentirse completo, lleno, sin lograr que su cuerpo se estremezca completamente de amor.

EL AMOR NO TERMINA

Llovía al momento del arribo del féretro al panteón, la marcha fúnebre se oía a lo lejos…… ¿porque él? ¿por qué? se oía en el aire, mientras las lágrimas resbalan una y otra vez por las mejillas de algunos presentes, era joven y con toda la vida por delante, ¿porque él? ¿por qué? al momento de bajar a Joshua en la fosa donde sería depositado para su descanso eterno, Bryon, al verlo quería dejarse caer, como iba a poder vivir sin él, habían estado viviendo juntos por más de 2 años, sus lágrimas corren al ritmo de la lluvia, en eso sintió el brazo cálido de su hermano al abrazarle y tratar de darle consuelo, la muerte es tan cruel.

-Te acompaño en tu dolor, – le hablo Aldahir- muchos quisiéramos haber tenido la dicha de al menos haber conocido el amor, de tener una pareja a nuestro lado que nos apoye y nos guíe en este camino de incertidumbre, esa persona con la que siempre contaremos cuando estamos a punto de caer, ustedes tenían esa química, que los hacía únicos era muy grato verlos juntos su aura era mágica y a él le partiría el corazón verte así, cumple con tu luto, honra su memoria y enséñale tu mejor cara a la vida agradeciendo la oportunidad de haber conocido a alguien tan especial.

Bryon voltea y con lágrimas en los ojos le abraza y a la par comienza a decir…

Hermano…. Joshua era una buena persona, no merecía morir, tenía tanto porque vivir, nuestro amor perdurara mientras yo siga vivo, su recuerdo me hará más fuerte y me ayudara en mi camino, no sé si era el hombre más maravilloso del mundo, pero para mí era perfecto, dentro de sus imperfecciones encontré sus virtudes y ame sus defectos, aceptó mis errores y venció mis temores es por eso que lo hacía único, el amor no es perfección sino aceptación y adaptación, tus palabras me dan aliento y tranquilidad, gracias por ser mi hermano.

El amor es aceptación y adaptación, pensaba Aldahir.

La lluvia sigue cayendo aun cuando el sol aparece tímidamente como no queriendo ser parte de ese cuadro tan melancólico, pero se esconde de vez en vez para no mirar a los asistentes, Bryon les agradece por su presencia en la despedida de quien fue por más de 4 años su amigo, compañero, amante, mentor y amor, sus lágrimas siguen bajando mientras los recuerdos envuelven su mente y la nublan haciendo a un lado por un momento su triste realidad…. adiós, amor, siempre te recordare y nuestro amor perdurara a través del tiempo.

Pasa el tiempo y a pesar del dolor, Aldahir tiene una cita con el destino, ese que en varias ocasiones se ha mofado haciéndole creer que va a encontrar el amor tan anhelado, una y otra vez le presenta la oportunidad y se la vuelve a quitar, una vez mas se presenta a una cita ahora es el turno de Elina, no puede dejar pasar la oportunidad, tal vez en esta ocasión encuentre el amor.

ENCONTRANDO EL AMOR

Llegando a The VYNL, se encuentra con Elina, entallada en un vestido blanco escotado, tacón de aguja, glamurosa como ninguna otra que estuviera en ese lugar, una diosa terrenal que al verlo llegar se abalanza sobre Aldahir lo abraza y lo invita a entrar, piden una ronda de agua embriagante, entre charla y charla los tragos siguen llegando y el calor subiendo.

Elina lo lleva a la pista de baile, después de unos pasos incitantes y el continuo roce de los cuerpos el calor se siente abrazador, la música y el ambiente complementan lo innegable.

Varias canciones después el sudor resbala por el cuerpo de Elina dejando escapar las feromonas que envuelven el cuerpo de Aldahir, el deseo anuncia que es tiempo de partir, de descubrir que hay más allá de las ropas y sin premura bajan las escaleras del lugar para dirigirse a su departamento.

Al entrar en el departamento, Aldahir admira la belleza de Elina y le dirige unas palabras.

Elina, eres la mujer más hermosa que existe, tu belleza se compara con la grandeza del océano, la noche se siente celosa al mirar tu perfecta anatomía Dios creo a la mujer para que los hombres pudiéramos admirar su infinita magnitud y a mí me mando un ángel para guiarme en mi travesía de vida, ella ansiosa lo calla con un beso dando rienda suelta a sus mas intensos deseos.

Sus lenguas se movían frenéticamente buscando rincones inexplorados, las ropas caían y los cuerpos se movían, roce tras roce la temperatura crecía, con cada beso los fluidos bajaban, sus perfectos cuerpos sabían que movimientos hacer donde postrarse para dar placer, parecían el plan perfecto donde nada sale mal y el resultado es el clímax total, la intensidad juvenil siempre cautiva y maravilla y ellos no eran la excepción eran dos amantes sin igual.

Antes de quedar exhaustos se cercioraron de que ningún lugar quedara sin visitar, sin mirar, sin saborear.

La mañana los descubre abrazados, él intenta zafarse, pero ella con un rápido movimiento queda encima de él y le prohíbe escapar,

-Acaso deseo despertar con ella todos los días, pensaba Aldahir creo que otra vez me equivoque-

Los pensamientos no lo dejaban conciliar el sueño, venían a él todas las relaciones fallidas que ha tenido en su vida, cada momento vivido como si fuera el presente, tantos besos, tantas caricias, tantas palabras que no han hecho sino alimentar su desdicha amorosa,

-Porque sigo pensando en ello, que caso tiene, lo único que importa es encontrar una buena persona con quien pasar el tiempo-

-Mi hermano Bryon encontró el significado del amor y que poco le duro, qué sentido tiene la vida si no puedo continuar con la persona que amo, que decisión tan difícil, amar sin razón, sin freno, incapaz de pensar en las consecuencias o pensar en la conveniencia, en la tranquilidad, en la paz, que difícil decisión, creo que por eso estoy solo, por eso no encuentro lo que busco-

-Es mucho desgaste mental, no debería de preocuparme por estas tonterías, a partir de ahora, disfrutare de cada momento, aprenderé de cada experiencia y encontraré la paz que me hace falta-

¿Qué será lo que estoy buscando?

El ruido de un claxon hizo que Elina se despertara, su felicidad se podía percibir a kilómetros de distancia, despertar y ver a Aldahir a su lado había sido su más grande deseo desde que se incorporó a la empresa de su padre, todavía recuerda ese primer día, un hombre atlético de cara gentil y rasgos hermosos le abría la puerta de la entrada y con una sonrisa amable le daba los buenos días, al contemplar sus ojos de un azul intenso, sus palpitaciones comenzaron a subir de intensidad no entendía porque este hombre que acababa de ver, le transmite tal sensación.

Hola… es lo único que pudo salir de la boca de Elina al momento que esbozaba un ligero suspiro.

! Elina¡!Elina ¡

Se escucho a lo lejos, era la voz de su hermana que la llamaba, -sé que estas con Aldahir, baja de inmediato nuestro padre está muy preocupado porque no llegaste a dormir-

Ella se incorporó como una pantera, mientras recoge sus prendas dispersas por toda la habitación, procurando que Aldahir contemplara cada centímetro de su maravilloso cuerpo, y de vez en cuando volteaba coquetamente para cerciorarse que el no perdiera detalle de tan magnifica pintura, poco a poco las prendas envolvían su desnudez, mientras la cordura regresaba a sus mentes.

¡Quiero verte de nuevo, que sea hoy en la noche! Exclamo Elina

No es una petición, es una orden en la que no cabía la negativa.

Aldahir se incorporó lentamente, desnudo y mirándola a los ojos le regalo una sonrisa al momento que se acercaba para depositar sus labios en su frente, -Mi niña, tus deseos más profundos son órdenes para mí, todo mi ser se llena de alegría al escuchar petición tan placentera y mis ansias se vuelven locas por poseerte otra vez- al momento que pasaba uno de sus dedos por sus húmedos labios, la tomo por las piernas y la levanto sin problema al momento que pegaba sus labios con los de ella y le arrancaba un jadeo para por fin dejarla ir.

Mientras ella bajaba por las escaleras, el comenzó a vestirse y un millón de pensamientos inundaron su cabeza, mientras se preguntaba una y otra vez que se sentirá amar de verdad.

RECUERDOS, DOLOR Y AGONIA

Al otro día en uno de los salones de la empresa, algunos de los clientes más importantes de la ciudad, se reunían para escuchar las propuestas que les tenía Aldahir.

-Son todas las acciones y estrategias que emprenderemos con el objetivo de agregar valor a su producto o servicio a los ojos de los posibles consumidores- Exclamaba Aldahir mientras les presentaba varias propuesta de negocio, en la oficina todos murmuraban, los altos mandos estaban ante la oportunidad de concretar una de sus mejores negociaciones que los catapultarían a lo más alto de la elite publicitaria y él, era el encargado de convencerlos, con entusiasmo se le escuchaba hablar con los presentes, su voz relataba una y mil oportunidades para impulsar su marca, su forma de moverse y hablar encantaba a los presentes, presentaba propuestas que invitaban a soñar.

En uno de los pasillos algunas mujeres murmuraban.

-Es muy sexy. Y guapo.

-Cállate que nos pueden oír, escuche que es novio de la hija del dueño.

Miranda pasaba por ahí y al escuchar el comentario, no pudo contener un gran dolor que la consumía por dentro llego corriendo al baño y sintió desvanecerse mientras las lágrimas bajaban por su hermoso rostro, el rímel enmarcaba sus ojos rojos mientras ella sentía que el pecho le quemaba, había añorado muchas veces ser ella la que estuviera a su lado, soñando despierta se había visto en múltiples ocasiones paseando con él, tomados de la mano, regalándose miradas mudas que gritaban los más hermosos sentimientos y ahora todo eso se desvanece con la llegada de la hija del dueño, que oportunidad podría tener ella ante una mujer tan hermosa como Alina.

Como pudo se incorporó, seco sus lágrimas y salió del baño, se dirigió a su lugar de trabajo, tomo asiento y cabizbaja comenzó a trabajar, las palabras le atormentaban la mente, la idea de perderlo la volvía loca, no era suyo, pero no perdía la fe y ahora con esta confesión su mundo se derrumbaba, su cuerpo temblaba y su ansiedad crecía, tuvo problemas para respirar, esto hizo que sus compañeros se preocuparan, Cristal se le acerco y con tono delicado le pregunto.

¿Miranda te encuentras bien?

Estas pálida, deberías retirarte a tu casa.

Miranda al levantar la cara, sollozando le dice…

Lo he perdido amiga, lo he perdido, mi temor a confesarle mi amor ha hecho que se aleje la posibilidad de tenerlo en mi vida, lo que más anhelaba hoy se disipa en el recuerdo, el tiempo no perdona, brinda oportunidades pero si no las tomas se las ofrece a alguien mas, ¿porque es tan cruel?

Viene a mi el recuerdo de aquel dia donde lo vi por primera vez, era de noche y el se acercaba caminando por la calle, como si el tiempo se hiciera mas lento a cada paso que daba, la luna emitió una ligera luz como una gran farola anunciando su llegada, chaqueta en mano, paso firme y mucha confianza, con gran carisma al voltear nos regaló una sonrisa sin igual.

Al día siguiente mis amigas y yo estábamos con la incertidumbre de conocer al nuevo integrante de nuestro lugar de trabajo, había comida y bebida cortesía de la empresa, tiene que ser alguien importante para darle este recibimiento pensamos nosotras y la sorpresa fue mayúscula al ver que se trataba del mismo joven que recién habían visto, el mismo dueño salía a recibir a este misterioso joven que pasaba junto a nosotras.

Una de mis amigas se apresuró a blasfemar, ¡Todo este teatro para recibir a este niño mimado, ególatra y que parece que no quiere despeinarse, lo bueno es que hay comida y bebida gratis, es por lo único que vine!

Sin embargo yo sabia que el, tenia algo especial, lo supe desde que lo vi por primera vez, la noche transcurría y llego el momento de la presentación, la joven promesa hacia su debut en las grandes ligas, muchas esperanzas estaban postradas en el y con cada palabra la presión se podía ver en su rostro a tal grado que quiso escapar del lugar, sentía que necesitaba respirar y el balcón seria la salida perfecta para calmar la ansiedad, por desgracia o por fortuna Miranda se encontraba ahí, quedo inerte y sin poderse mover al verlo llegar, ¡vaya si el destino es cruel! juega con las personas y crea situaciones incomodas queriendo propiciar un desequilibrio emocional entre ellas, la música no ayudaba en nada, sonaba una de las canciones favoritas de miranda.

Cuando tuvo un poco de valor y fuerza quiso desaparecer, pero la voz tenue y desesperada de Aldahir no permitieron que lograra dar un solo paso.

¿Podrías quedarte por favor? Le pidió Aldahir en tono de súplica.

¡Acaso me estaba hablando a mi! Pensó Miranda.

Asenté con la cabeza y logre girar mi cuerpo para quedar de frente a el, su presencia era impactante aun a su corta edad, pero su fragilidad en ese momento hizo que me llenara de ternura al verlo, comenzó a hablar como buscando alivio y con cada palabra que salía de su boca mi nerviosismo se iba desvaneciendo, no se si fueron las copas o su sencillez lo que logro que mi cuerpo se relajara, la confianza y el agrado se iban apoderando cada vez mas del ambiente, fue la mejor noche de mi vida, no quería que terminara, no parábamos de reír y los constantes roces de nuestras manos hacían de nuestra velada única, inigualable, pero el destino nos quería enseñar otros caminos antes de dejarnos en paz, vaya que el destino es cruel….

La noche se hacia vieja y anunciaba la partida de algunos presentes, yo no quería que terminara jamás, sin embargo el constante agobio de mis amigas hizo que tuviera que retirarme de ese lugar, no sin antes hacernos la solemne promesa de continuar con tan amena charla.

Esa noche, no pude dormir mi cuerpo ansiaba el incesante roce de la piel de Aldahir aun cuando solo fueran leves roces, estos hacían estremecer todo mi ser, mis ojos anhelaban volverlo a ver y mi boca se entreabría de vez en vez, en búsqueda del apaciguamiento con el calor y el sabor de los labios de él, mientras trataba de conciliar el sueño.

En el transcurrir de los días, en repetidas ocasiones nos topamos en la oficina, pero nuestros horarios tan ajustados no nos permitían un minuto de interacción personal, las sonrisas iban y venían hasta que en una ocasión, el destino hizo de las suyas y nos acerco para trabajar en un proyecto.

¿Tu casa o la mía?

Sono el timbre de mi puerta, Aldahir al ver la obra de arte que le abria quedo anonadado, recuerdo que sali con un atuendo muy favorable para mi físico, dejaba ver la bonita figura que tenia, esos jeans ajustados invitaban a imaginar el maravilloso regalo que guardaban en su interior y la blusa jugaba con la cordura de cualquier masculino que osara verla y él no era la excepción, quería llamar su atención pero no quería que pensara que yo seria una mas en su lista de conquistas así que jugué un poco con el.

Sonaba a invitación, pero tenia que recordar que era junta de trabajo, sin embargo no podía dejar de verme, mi blusa se burlaba de él al dejarle ver solo lo necesario y darle esbozos de mis virtudes físicas, las transparencias dejan entrever la perfecta sincronia de mis formas femeninas,

-aagghh no puedo concentrarme- pensaba Aldahir.

¡Aldahir¡ creo que estas divagando, le grita Miranda ¿en que estás pensando? jajajajaaja.

En ti, contesto Aldahir……

Se hizo un silencio incomodo y después de unos minutos.

Aldahir no resistio mas y se abalanzo encima mio y me robo un beso, claro que lo rechace enojada le pedi que no volviera a hacer eso.

-No es correcto que hagamos esto, es una sesión de trabajo no podemos mezclar las cosas, comencemos nuevamente- le dice Miranda, su cuerpo aun temblaba de emoción le gritaba que fuera con él, su boca le suplicaba un poco mas, pero su pudor le frenaba y el arrepentimiento le llegaría mas pronto de lo que se imagina, solo el recuerdo queda de lo que pudo ser.

URL de esta publicación:

OPINIONES Y COMENTARIOS