Resulta que cuando a uno le llega la tusa MALDITA TUSA, uno siente que no esta preparado para afrontar el cambio, uno solamente piensa en que la vida se le descontroló de una manera para la que no estaba preparado.
Los amigos llegan y dicen que lo mejor es rodearse de la gente que te quiere y que lo mas importante es mantener la mente ocupada en otras cosas, los especialistas te dicen que debes omitir el contacto en redes sociales y que incluso lo mejor para el momento es evitar a toda costa los encuentros físicos.
Lo cierto es que a pesar de querer llevar la contraria a todos quienes te quieren lo mejor es hacer caso. Buscar redes de apoyo, cambiar hábitos anteriores, reencontrarse con amigos, leer libros nuevos, albergar sentimientos positivos y pensamientos que traigan cosas buenas a tu vida.
La noticia es que generar un cambio es lo mas difícil que trae una ruptura porque estamos tan acostumbrados a un ritmo de vida y a un estilo acomodado que los cambios nos chocan tanto que lo mas fácil es acostumbrarse al dolor. Pero es posible ser feliz y solo pensando así y creyendo fielmente que de todo se aprende lo mas importante es rescatar lo bueno, saborear lo aprendido, no repetir los mismos errores y disfrutar las nuevas oportunidades que vienen con los cambios.
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