Y sin darme cuenta, cuando menos lo espere en tus ojos, divinos como una esmeralda, encontré una nueva galaxia
Y yo sin ser astronauta me quise perder en ella, quise quedarme horas admirando, como quien admira una pieza de arte, anhelando conocer cada secreto plasmado, anhelando embriagarme de todas las sensaciones que me traía el simple acto solo pensarte.

OPINIONES Y COMENTARIOS