Hay un recuerdo distante,
una imagen,
algo parpadeante,
ausente.
Fuegos radiantes vuelan como pensamientos y es el viento ahora quien pega fuerte sobre mi cara para despertarme.
¿Estoy soñando?
No hay deseo que no albergue una tragedia,
y es la vida misma quien se convierte en tragedia cuando no hay deseos.
Los sueños se esconden en algún rincón.
Y es hoy, el día en que todo parece oscuro.
Momentos de calma,
momentos de rencor,
momentos de rabia,
momentos de Amor.
Al final todo se reduce a momentos
como recuerdos impregnados en la mente,
donde al volar por ellos
el tiempo parece detenerse.
Felicidad
es verme solo y encontrarte a vos.
En algún lugar,
en algún destino.
En algún rincón,
en algún amar.
No soy yo si no es con vos, y no sos vos si no me ves en tu reflejo.
Un espejo que se ve ausente y borroso,
como un recuerdo inerte en la lejanía de nuestro inconsciente.
¿Quien sera el dictador de este laberinto,
y quien moverá las fichas de este tablero que se tambalea?
Una belleza utópica que se esconde detrás de pupilas color miel,
y una vida reflejada detrás de una sombra que por momentos emite colores.
Como dicen,
lo que tiene que ser, sera.
Si no es hoy,
que sea mañana,
y si no es mañana
entonces esperare
por el resto de la eternidad.
Solo para amarte.
Sentado en algún rincón
de alguna ciudad,
en alguna parte de este pequeño y vasto planeta.
Escondiendo en mis suspiros la esperanza
de algún día,
volver a encontrarte.
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