Prólogo
Era de noche, dos planetas, de dos galaxias distintas estaban en diferentes puntos.
Xilovarts, el planeta de los hombres ígneos estaba en paz, todos estaban durmiendo y era la media noche, todos estaban en una paz increíble, excepto los reyes, que estaban en un gran problema debido a sus hijos, que, por una crisis, tuvieron que mandar a su hijo a un planeta fácil de habitar, con seres débiles que no serían problema para su hijo prodigio, el príncipe del fuego, o como lo conocían algunos F.G, o Fire God (Dios del Fuego) Muchos habitantes del planeta lo apodaron así por sus grandes dotes, a pesar de ser un niño.
En cambio, en Graptelus, el planeta de los espíritus, las cosas eran diferentes. Una Gran guerra se había desatado, los espíritus estaban en una constante pelea con los Procterios, entonces, dos simples espíritus, preocupados por su hijo, robaron una capsula de viaje, pusieron a su hijo fantasmal directo a la tierra, y activaron el piloto automático, su hijo fue rumbo a la tierra.
OPINIONES Y COMENTARIOS