Atado a mi locura, esclavo de tu ausencia, ansioso por mi encierro, hueco sin esencia.

Líneas en un papel que ilumina mi rostro en el centro de la oscuridad nocturna, líneas que invocan tu presencia y palabras que derraman lágrimas en la quietud de mi cuerpo.

Qué fue lo que pasó, un error, un pensamiento, un sentir desorientado preso en un corazón cronometrado, sin seguros, sin candado.

Sentimientos derramados, aislados de la realidad, domados por la fantasía.

URL de esta publicación:

OPINIONES Y COMENTARIOS