Perdiendo la cordura

Como me pude dejar arrastrar hasta un lugar así, pensé mientras miraba alrededor escuchando la música que en aquel momento sonaba a la vez que en un tono más elevado anunciaban a las chicas que iban salir al escenario…, si se podía llamar así.

Lo que todos esperábamos…¡¡¡¡ Lucero y Candy!!!!

Después de ese anunció el ambiente se caldeó, todos los que estaban hablando se giraron hacia aquel pequeño espacio, parecían muy entusiasmados con aquel llamado. Que clase de sitio sería aquel al que me habían arrastrado mis amigos.

– Verás que bien te lo vas a pasar, son las mejores. Ya verás. -Afirmó Gabe.-

Me límite a esperar mientras bebía mi cerveza, esperando aquel «gran acontecimiento». La música cambio a la par que se levantaba el telón y una luz blanca alumbraba el centro del escenario dónde estaban Lucero y Candy.

Comenzó el show en el cuál parecía que tendríamos una especie de baile o algo por el estilo. Cuando la primera chica abrió los ojos no pude dejar de verlos eran totalmente rojos parecían llenos de sangre a la par pude ver otros ojos más abrumadores plateados, pude sentir como penetraron en mi.

Al terminar el show mis amigos llamaron a Lucero.

– Hola chicos, tanto tiempo sin veros por aquí. Ya hasta empezaba a extrañaros. -dijo con una sonrisa a la vez que se sentó.-

– Trajimos a un cliente más, -dijo T.J. haciendo el gesto con la cabeza hacía dónde yo estaba.- hoy es un día especial, es su cumpleaños.

– Encantada, me llaman Lucero. ¿Y tú?

-Vincent, encantado.

-Perdónale, es un poco tosco con las mujeres guapas. -Dice Gabe.-

-No pasa nada, lo entiendo. -contesta con una sonrisa de oreja a oreja.- Bueno chicos, tengo que seguir trabajando no puedo quedarme charlando con ustedes aunque me encantaría. Pasadlo bien divertíos. Feliz cumpleaños Vincent.