Pensamientos profundos

Llegar al salón de clases y saber que nadie me espera, que a nadie le importo,

sentarme sola sacar mi cuaderno, ponerme audífonos  y escuchar música mientras dibujo es mi confort una paz y tranquilidad me inunda y mis problemas miedos y pensamientos se van tan lejos que no regresan, por un instante me siento feliz por un instante me siento caminar  por un prado, un prado donde estoy sola y ninguna persona esta hay para burlarse, criticarme, molestarme, donde escucho la melodía

del viento y las aves, donde me siento libre y mis alas cortadas vuelven a crecer y volar lo mas alto, un lugar donde puedo ser quien soy, un lugar de libertad donde la tristeza se va y el enojo también un lugar donde soy feliz.

Pero lamentablemente la realidad me alcanza con el comienzo de las clases donde estudio arduamente y me apuro a realizar los trabajos que deja el maestro solo para regresar a ese lugar, ese lugar donde soy feliz, donde soy como soy, mis maestros no lo notan, mis compañeros preguntan porque me gusta estar sola dibujando en vez de jugar piensan que mi mundo es de color rosa cuando en realidad son escalas de grises tristes donde hay un rayo de luz de esperanza muy débil pero al dibujar mientras escucho música ese rayito de luz ilumina todo mi ser de unos colores cálidos que me abrazan donde el brillo que tuve alguna vez regresa por ese instante

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