Día tras día en la monotonía
Amores perdidos en las vías del deseo
Deseos desperdigados en la rutina
Vida perdida y vuelta a encontrar
Alegría mañanera muy serena
Caída traidora por los tropiezos
En un espejo de duendes traviesos
Pérdida y ganancia en una mano
Rueda de la apariencia lejana
Horizonte cercano a la paciente mirada
Guía y pastor a fuentes terrenas
A través de lluvias y tormentas de arena
La meta a la vista en la montaña
Ciclo de idas y venidas revividas
Caminos junto al árbol de la vida
Mas el bien y el mal se pierden en detalles
Detalles que dan o quitan el aliento
De quién sigue ciegamente al viento
Ola tras ola llegan las resacas
Rompiendo costas y playas espumosas
Calmando clamores vanos extraños
Sed y hambre constante del prisionero
Ecos de lamentos desde el fondo de la gruta
Calma tropical en brisa crepuscular
Susurrantes hijas de negras nubes
Torrentes torrenciales bramando errantes
Transformaciones abruptas azarosas
Tras la calma tras la paz la tormenta
Dorado amanecer tras turbulenta noche
Marcando prisa a la marcha diurna
Destino común para todos prescrito
En libros memorias de sermones perdidos
Olvido indulgente de penas servidas
En el banquete perpetuo demandante
Fruto de sacrificios rituales ancestrales
Malsana sangre donada con virtud
Carne manchada por el inclemente tiempo
Mente dañada por frases, rumores
Hipnotizada por himnos claros y oscuros
Voluntad y orgullo mezclados confusos
Confianza, esperanza convertidos en vicios
Retorcidas amalgamas de opuestos
Recetas milenarias en combinaciones nuevas
Brotan del vientre materno eterno
Y van girando en sus circulos orbitales
Perenne danza caótica hermosa
Deslumbrante en su perpetua inocencia
Con todas las salidas abiertas inalcanzables
Cadenas suaves en su insana maldad
De sedas y terciopelo a cuenta de reyes
Labrada por labradores esclavos siervos
Sus nombres todos olvidados enterrados
Sepultados en los cimientos de templos arcanos
Dedicados a dioses sedientos de sangre y placer
Universo cosmos material de ideas
Abstracciones encarnadas en realidad concreta
Vestidas embebidas con lujos pasajeros
Brillo ilusorio de fugaces estrellas
Fuego divino caído de celestial esfera
Escapados robados regalados en precio
Esparcidos por rústicos terrenos
Reverdecidos emanando fragancias
Proteus red de almas ansiosas
En busca del descanso prometido
Para quién cumple el deber exigido
Divididos por la duda unidos en certeza
De lo único alcanzable con propiedad
Ensombrecido por vorágine tonante
Que vomita la hez de su amarga hiel
En la cara del sufrido agonizante
A la busca de salud duradera
Destino escrito con letras de plata
En láminas de oro y carbón
Fénix fenecido en fenomenal féretro
Deslucido por pálidas cenizas
Huellas desdibujadas en tercos papiros
Insinuados en palimpsestos hallados
A la vera de caminos abandonados
Marcados por caravanas contorsionadas
En el acto turbio de humano comercio
Se yergue de hinojos hincando el diente
Mordiendo la mano que sostiene el eje
Mancha que extiende su impureza
Inmensidad de innumerables paralelos ocultos
Convicciones de conversos poco convincentes
Escindidos desgajados de sus troncos
Rendidos a crueles miserias inmisericordes
Emigrados desterrados retornando
A un rebaño unido aún más fuerte
Sentimientos comunes arraigados enraizados
Claros despejados a fuerza de arrancar vida
A la madre de todos a la Tierra
Dulce proveedora que a nadie se niega
Sus dones sus frutos e incluso su ira
Su voz su aliento y aún sus lágrimas de fuego
Marcando rompiendo el camino a su paso
Péndulo oscilante cargado de culpa
Admiración preferente de sí mismo
Naturaleza primordial del ego perdido
En naufragio abismal esencial
Pentecostés pagano pagado plagado
De desvaríos varios en torno a hogueras
Venida del Espíritu no tan Santo
Caído en desgracia obligado penitente
Cantando cánones no establecidos
Doctrinas de fe faraónicas
Frágiles caducas fuera de fecha
Páginas de pasión irresistibles irrepetibles
Irremisibles pecados por obra y omisión
Exégesis de constructos sociales glaciales
Exhibidas en excéntricas exequias
Mofa escarnio y burla monumental
Milagros perecederos pergeñados
Perfidia y deslealtad el abrazo estrecho
Insaciables insatisfechos inexpertos
Perpetuando niñez de cuerpo y alma
Perpetrando insalubres groserías
Infortunio del ingenuo ingenio originario
Malandanza presuntuosa muy oronda
Exultante insultante desabrida mitología
Modelado a imagen caótica excepcional
Renacimiento del devenir sempiterno
Semillero de empedernidos seres eminentes
Trastocados en la liberalidad de sus líbidos
Rodando en rocambolesco tornado cíclico
Inmersos sumergidos en innata obsesión
Desgracias entreveradas en graciosa danza
Mártires y santos de la gracia rancia
Abolengo capitulado al descarado descenso
Del infierno al purgatorio al cielo excelso
Ascenso histriónico ixiónico maratónico
Irónica histeria de la historia colectiva
Marcha marcada con signos fatídicos
Luces y túneles en ruinas abiertas
Encaramadas enarboladas banderas
Con colores sanguinolentos desvaídos deslucidos
Lucidez paciente a la espera impertinente
Congelado ataviado endurecido enredado
En limbo cenagoso extraviado
Estructuras relucientes al sol de mediodía
Exterior abrillantado por barniz artificioso
Callejas y callejuelas con sus callejeras prisas
Transmutaciones apresuradas en medio de nada
Adecuar el contenido fluido al continente
Y marchar manchándose de lodo fangoso
Frondoso bosque de acacias y pinos
Perdido entre preferencias mezquinas
Mancillado por injurias injustas
Más libre de culpa u oprobio propio
Aburrido de tantos atavíos redundantes
Abarcando en sus velas insufladas
Insubordinado ante tantas corrientes
Con frágil barca haciendo agua echando pestes
Cargado de halagos insufribles insostenibles
Obtusa petulancia insondable feudo
Servil oportunismo inoculado en jirones
Infusión paliativa de síntomas penosos
Empecinado en curar lo irremediable
Penurias imperceptibles en peñascos alevosía
En penumbra de peonza rocosa
Rituales rivales rodando la praxis
Entroncado entronizado en el Coliseo
Para colmo de discípulos indóciles
Indisciplinados por debilidad de la vara
Disgregados en la disconformidad discordante
Hospedados en huecos huidizos fugaces
Mocerío amodorrado en modesto huerto
Laboriosa labranza en sus entuertos
Entonando requiem hermético hermenéutico
Oratoria elocuente fervorosa canción
Convertida en grito en flamante oración
Fragante dicha vuelta a brotar en un corazón
En mi corazón
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