Palabras de la mente, oraciones del corazón

Escribir…

Escribir…

Escribir…

Palabras en tinta, escritas del corazón de una persona. Desdichada o no, es maravilloso a lo que se llega mediante este medio.

Increíblemente, es uno de los medios más empleados. Las palabras no son solo simples letras unidas para formar un lenguaje, no, son sentimientos en tinta. Son los sollozos de las almas, son un baile de manos. No son inútiles, por el contrario son más poderosa de lo que parecen, un simple adjetivo puede describir un momento pero una frase o un párrafo puede describir una experiencia.

Lastimosamente, son degradadas son sometidas bajo la ignorancia de la población supeditadas a la suerte del conocimiento de quien las emplea y de quien las recibe.

Todos aquellos que las han probado las han adorado, no sólo por ser un método no difícil de comunicar, es mas fácil escribir un «te amo» a decirlo. Porque, si bien es cierto las palabras se las lleva el tiempo las hojas no.

Es por eso que al ser una adolescente y ver como mis contemporáneos torturan las palabras, es desagradable ver como escriben.