Odio

Se presenta rabia oscura a mi cabeza, Turbulenta avanza y se mueve de aquí a allá. Desafortunadamente, carece de pereza pues realmente uno se ve tentado a asumir que no tiene fin debido a su avance desalmadamente desenfrenado. Es algo tan turbio y peculiar este odio pues no está dirigido a nada ni a nadie sino a una totalidad de los sucesos. Es prominente e imponente, impide el paso de cualquier moción y no negocia a la hora de tomar terreno, es incomprensible y contraproducente en una totalidad abrumadora de la mente, Repulsivo y parasitario trémula. ¡Y ay! Como hace añorar esas parcelas de emoción y felicidad veraz que te deja admirar en la lejanía, pero a modo de burla porque al mismo tiempo te convence de que, debido a su presencia y numerosos contratiempos que se presentan, no lograras pisar. Es tan hipócrita la herramienta carente de empatía que utiliza para simular el sentir que te encuentras en ese lugar, corrompe la mente y desgarra el alma, te hunde a pasos agigantados con lágrimas de plomo que produce como gotas de lluvia durante una tormenta oscura y amenazante.

En una gran cueva apareció un gran sabueso negro de ojos rojizos, su visión se desvanecía en mí y se difuminaba de a ratos, pero estaba en constante movimiento, la estela negra que dejaba por lo borroso parecía una túnica que arrastraba al viento. De un lado a otro de la cueva, acechando quizás o vigilando, pisando las pequeñas hierbas que crecían a través de la grieta. Estuvo así en movimiento horas, días o quizás más, el tiempo es también difuso; pero la bestia carecía de pereza, no se fatigaba ante ninguna constancia de sus movimientos. Sentía sus gruñidos, parecía realmente encolerizado, pero no hacía nada en especial, estaba alerta a todo y se tornaba amenazante a todo. Parecía que nada podría parar a este ser hasta que devorara todo, lo mejor era no presentar movimiento ni intención alguna y se sentía como si cada vez se hiciera más grande y complicado de enfrentar. Salió de la cueva, al mundo, al todo que deseaba consumir, una parte contraproducente de la naturaleza que destruiría todo y a sí misma. Repulsiva toma terreno y avanza tremulante como un parasito de la existencia