Me pregunto como la gente puede lidiar con el amor de una manera tan fácil, desde que era pequeña me han enseñado que el amor es algo que se debe sentir bien, algo que te hace sentir pleno y feliz. Pero a mis cortos 18 años nunca he sentido ese tipo de amor, ese amor que te debe de llenar por completo, ese amor que se debe de sentir, ese que te hace sentir que eres consumido por un gran sentimiento de felicidad, enamoramiento; siempre me he quedado deseando por más.

Quiero ser amada de una forma descontrolada, quiero sentir demasiado amor al punto que este sentimiento sea tan fuerte como para callar mis pensamientos, esos pensamientos que me aturden por las noches, que me hacen querer desaparecer. Quiero ser amada y sostenida de una forma en la que no sea lastimada, que no termine con quemaduras.

Toda mi vida he asociado el amor como una gran estrella o como la luna misma, tan brillante y lejano, que a pesar de que sea una noche fría y oscura al final siempre nos va a conceder un poco de su brillo, pero desde que te conocí empecé a asociarlo como el sol, algo grande, tan grande y brillante que si te acercas demasiado puede llegar a quemarte, lastimarte y dejarte heridas irreparables.

Tu eras como el sol, recuerdo los atardeceres que pasábamos a solas, cuando podía observar como esta gran estrella se manifestaba en ti, veía la puesta de sol sobre ti, sobre tu cuello, sobre tu cuerpo, sobre tus grandes ojos haciéndote ver cien veces más hermosa para mí, también recuerdo haber sentido ese ardor dentro de mí, ese sentimiento que quema que arde con gran intensidad, ese sentimiento que no puedes apagar hasta que el mismo se extingue.

La segunda vez que volví a ver el sol manifestándose en nuestro amor fue cuando me sostuviste y mientras me lastimabas por primera vez, mientras sentía las miradas de todos sobre nosotros ¿no se suponía que lo nuestro solo era entre nosotras? ¿Por qué sentía que tu eras como una estrella grande y brillante mientras yo a tu lado no era ni siquiera un pequeño fragmento de nebulosa? ¿Por qué tenía que consumirme ese gran sentimiento de inferioridad? ¿Por qué tenía que rogar por que me amaras como yo te amaba a ti? No soportaba intentar abrazarte y terminar con quemaduras por todo mi cuerpo, si el amor es tan brillante como el sol, no quisiera experimentarlo una vez más. Por que siempre ha sido simple, el amor no debería de quemar, no de esa forma.

URL de esta publicación:

OPINIONES Y COMENTARIOS