Notas sobre la felicidad

¿Qué es la felicidad? Para empezar, no es tener el dinero suficiente para no pasar necesidades, he visto a la gente solvente que todos los días quieren más y son desdichados por no tenerlo; tampoco no es una pareja perfecta, porque cuando pasa el tiempo y llegar la “costumbre”, inconscientemente nos atrae y nos llama esa otra persona que es “más fresca” aunque sea mucho menos que lo que tenemos en casa.

Esto por mencionar dos ejemplos. Podríamos mencionar todo lo que pensamos que nos haría felices pero, mejor aún, mencionemos qué nos ha hecho felices: en mi caso, una de las cosas que me dio una inmensa felicidad fue cuando vi al doctor sostener a mi hija de los pies mientras ella -bañada de rojo y todavía con su cordón umbilical- abría sus ojos y daba sus primeros gritos a todo pulmón; pero esa felicidad duró pocos segundos, porque justo después de eso tuve miedo, igual de grande como el amor que le tengo, un miedo a fallarle, a no ser suficiente; entonces tampoco fui feliz.

Los seres humanos parecemos condenados a que nada en este mundo nos haga felices, porque una vez que lo somos, salimos en busca de una nueva felicidad más grande e intensa que la que sentimos, por esta razón buscamos riquezas, mil parejas, seres súper naturales que nos den eso que somos incapaces de encontrar, una felicidad que estamos tan seguros que no conseguiremos que ponemos toda nuestra fe en adquirirla después de nuestra muerte.

Hoy, mientras desayunaba, mi pequeña hija de 2 años de edad se levantó y empezó a correr de un lado a otro, después se detuvo y daba pequeños saltos y reía; cuando tenía como 10 minutos de hacer esto, y yo la misma cantidad de tiempo de contemplarla, levantó la vista y me sonrió. Fue en ese momento que la encontré, pude ver la felicidad en sus ojos, una felicidad enorme, perfecta, ella con su pila de juguetes y acostumbrada a estar jugando con sus primas, no necesitaba nada, ni compañía ni un juguete nuevo y, mejor, solo necesitaba estar, ser, vivir, disfrutar de todo y cada una de las cosas que ve en cada segundo de su vida…

¡Sí! tienen razón, nada nos hace felices, precisamente porque no necesitamos de nada para serlo, solo necesitamos abrir los ojos y ver todo, tener esa capacidad de asombro de los niños, el ver las cosas, no los conceptos que tenemos sobre lo que miramos, solo ver las cosas, vivir y disfrutar de todo, sin necesitar nada. Todo lo que queremos lo vamos a obtener el día que como niños aprendamos a vivir.