Madre de las noches

Madre de las estrellas

Mi turbia luz

Dueña de mis lagrimas.

En ti vive la luz de 

la esperanza que va

del rojo vivo al

blanco triunfal.

Un manto de nubes

te rodean para protegerte,

así como tu me sigues 

para guiar mi camino.

Cada día espero tu llegada,

pero nunca son iguales;

si estás contenta esperas

hasta que mi llanto termine.

Sé que estas harta de mí 

y mi sufrimiento.

Sabes que tu luz es mi única esperanza.

Cuna luna te transformas 

cada vez que necesito 

de un arrullo para un dulce sueño.

Eres como mi madre,

sobre ti deslizo mi cuerpo 

hasta el amanecer.

Serás la única en 

este mundo en la 

que pueda confiar,

sé que hasta el día de mi muerte

no me dejaras de proteger.

Dejas caer a brisa sobe mi rostro,

cada vez que escapo a verte

y si mañana me faltas,

correrán mis lagrimas hasta formar un mar,

un inmenso espejo en el que se refleje

tu blanco y pálido rostro.

Seré capaz de decir

estas ultimas palabras a mi madre,

Luna: madre mía, madre de las noches,

vida y esperanza para un hijo,

hoy te has ido y en mi alma queda un vacío.

y caeré a un foso de serpientes y 

escorpiones,

al saber que esta opaca luz

se apagó junto a mi corazón.

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