Lo siento, Creo que no hay mejor comienzo, al menos hoy y ahora.

Es que siento ser tan yo que tú no seas tú a mi lado. Siento desnudar no sólo mi piel, sino mi alma cada vez que estoy contigo. Siento que me tengas por una pesada que viene de tanto en tanto contando un cuento para no dormir, porque conmigo nunca duermes.

Siento, siento mucho. Y no sólo el perdón; siento el deseo que a ti siempre te faltó. Siento no haber hecho cosas nuevas, siento caer en una rutina de la que no sé salir, porque seamos sinceros, contigo no sé na’ de na’. Siento no ir a buscarte una mañana en coche y darle cinco vueltas al mundo sin temor a un mañana… ¿pero dónde voy yo sin carné?

Siento, siento tanto que a veces no sé que digo. Siento el cariño que ambos se nos escapó, tú por desgaste y yo por inexperiencia. Siento las manías a las que no te has acostumbrado, soy difícil hasta para eso de hacer las cosas mal. Siento el calor que perdiste mientras yo trataba de ganarlo, inocente de mi por creer que podría ser fuego en vez de hielo y ahora he acabado quemando tus ansias y apagando las mías… porque recordemos que el hielo también quema.

Siento entre 0 e infinito. Siento no haber leído previamente las reglas de tu juego y haber lanzado los dados en busca de suerte, mira si seré mala que me han salido dos ceros… Siento las palabras de más y los gestos de menos, pero nunca fuiste resta en ninguno de mis problemas. Siento la necesidad de seguir, de aumentar, de ampliar… de querer construir algo que estaba en quiebra, en ruinas; game over.

Lo siento. Creo que empiezo a entenderlo.

Siento, pero no por ti, sino por mí. Siento perder la cabeza por alguien que pierde las ganas. Siento ser tan vulnerable hacia el que tiene su soledad merecida. Siento abrir los ojos demasiado tarde, porque para entonces decenas de balas ya han entrado dentro de mí, tratando de desmontar un cuerpo inerte que ya perdió la conciencia hace algún que otro momento. Siento no tener unas buenas cartas con las que empezar la partida, no puedo esperar otra cosa si eres tú quién las bajara asegurando darme lo peor que hay en ti, Siento no poner un stop cuando vas demasiado acelerado, maldita sea… porque le estoy cogiendo el gusto a la velocidad.

URL de esta publicación:

OPINIONES Y COMENTARIOS