llorar sangre y gritar dolor

Necesitar a alguien que simplemente no está, que nunca vas a poder escuchar su voz de nuevo, que poco a poco vas a ir perdiendo el recuerdo de su rostro. No poder sentir su calor, ni sus abrazos, no volver a ver su sonrisa. Extrañar las peleas cuyo desenlace era mediocre y sin finalidad alguna, pero de todas formas lastimaban. Es injusto y triste como una persona puede irse de un momento a otro, sin siquiera decir simplemente «adiós». Porque lo más difícil de esto es dejarla ir y una pesada tristeza queda en mi alma. No recordar momentos lindos, solo cortes, pastillas, susurros ¿No se suponen que los susurros no deben ser tan ruidosos? Pensar que no podrá ver tus logros, ayudarte con tus problemas, verte feliz una vez más. Y ahora me doy cuenta que ella murió, como una rosa que pierde su rojo intenso y pasa a no ser más que una flor marchita del montón. Y cuando ella se marchitó y la ultima hoja del hermoso árbol cayó, tocando el suelo, parte de mi también murió y ahora estoy perdida en mi dolor,